Resucitar a Montesquieu por Jorge Urosa

Creo que fue Guerra el que pronunció aquella famosa frase: «El que se mueva no sale en la foto», con lo que daba a entender muy a las claras que para él, eso de la división de poderes iba camino del cementerio. Es evidente que las intromisiones del Gobierno socialista durante estas dos últimas legislaturas han sido flagrantes. Baste recordar cómo un ministro de Interior se iba de cacería con Garzón para preparar una «caza mayor» de los rivales políticos, o cómo hace pocos días el fiscal general del Estado ponía de manifiesto que se iba inhibir en el «caso Campeón» porque tenía amistad con Blanco. Esa misma amistad no le hizo inhibirse a la hora de perseguir al señor Camps. Sin embargo, hasta ahora siempre habíamos visto a los miembros del Ejecutivo pedir respeto para las decisiones judiciales, parecía que con el poder judicial no se iban a meter. Ni ese fortín ha resistido las furibundas iras del PSOE. Desde que los jueces han empezado a incomodarles, el socialismo más oscuro ha vuelto. Guerra ha rescatado su lengua mordaz para cuestionar, en un digo sin decir, la reputación de la juez de los ERE en Andalucía, y todo porque solicita las autorizaciones firmadas por Griñán. Pues ya está bien, el Estado de Derecho debe reaccionar frente las intromisiones de los políticos a los jueces, y si Montesquieu ha muerto a manos del señor Guerra, tendremos que resucitarle.

Jorge Urosa
Profesor de Derecho en la URJC