Ministerio de Justicia

Francisco Rubio Llorente: «El papel de la Justicia con ETA es el mismo de antes aplicar la Ley y el Derecho»

Francisco Rubio Llorente, actual presidente del Consejo de Estado y ex vicepresidente del Tribunal Constitucional, recibirá hoy el Premio Pelayo para Jurista de Reconocido Prestigio, del que Su Majestad el Rey Don Juan Carlos ostenta la presidencia de honor.

La Razón
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MADRID- Rubio Llorente considera que el anuncio de ETA de abandonar las armas no debe influir en la Justicia y aboga por establecer mecanismos que impidan que se pueda volver a repetir el retraso de varios años en la renovación de algunos magistrados del TC que terminó con la «dimisión» de tres de ellos.

–Usted fue vicepresidente del TC. ¿Considera que ha llegado el momento de abordar una reforma?
–Creo que la experiencia ha puesto de relieve que el Tribunal está encontrando dificultades cada vez mayores que derivan de la enorme carga política que sobre él se ha echado. Como la principal vía de esa sobrecarga es la utilización que las minorías parlamentarias hacen del recurso directo de inconstitucionalidad, creo que habría que considerar la conveniencia de eliminarlo.

–¿Qué opinión le merece todo lo sucedido alrededor del TC, relacionado con el retraso en la renovación y la «dimisión» del vicepresidente y otros dos magistrados?
–Naturalmente, como a todos los españoles, me parece que el retraso reiterado y prolongado en las renovaciones periódicas del TC es lamentabilísimo. Desde ese punto de vista, me parece plausible la decisión de «dimitir» a que usted se refiere. Formalmente no puede tener efectos jurídicos, pero seguramente sí ha sido útil como aldabonazo.

–¿Cree que habría que modificar el sistema de elección o de no vincular su permanencia a un mandato prefijado?
–Más que corregir el sistema, lo que habría que hacer es utilizarlo bien, cosa que es posible, como demuestra la práctica de los primeros tiempos. Dicho esto, también convendría introducir, como se ha hecho en otros países, algún mecanismo que impidiese el bloqueo indefinido de las renovaciones.

–Todos los partidos llevan en sus programas proyectos para mejorar la Justicia. ¿Qué diagnóstico hace usted?
–No me siento especialmente cualificado para hacer el diagnóstico que me pide. En mi opinión tenemos un sistema judicial razonablemente bueno como corresponde a un Estado democrático desarrollado, pero seguramente, como todo, es un sistema perfectible.

–¿Considera que ha sido en buena parte la olvidada de los gobiernos en las últimas legislaturas?
–No me parece que haya sido olvidada en las dos últimas legislaturas; sobre todo en la que ahora termina. Basta ver los datos objetivos.

–¿Qué papel debejugar la Justicia en este nuevo tiempo en el que ETA ha anunciado que abandona la actividad terrorista?
–El mismo que antes: aplicar la Ley y el Derecho.

–¿Cree que está en riesgo la unidad de España?
–No, no lo creo, aunque durante mucho tiempo, tal vez siempre, haya tensiones entre el centro y la periferia.

–¿Habría de dotar de más competencias al Consejo de Estado?
–Más que dotarlo de competencias nuevas, lo que a mi juicio cabría hacer es potenciar alguna de las que ya tiene y, por el contrario, descargarlo de otras en las que su aportación es escasa.