Eurocopa

México

El enterrador de Francia

Doménech en el punto de mira de las críticas tras la derrota ante México. Sólo un milagro les clasificaría 

La Razón
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Madrid- Los astros no le fueron propicios y Raymond Domenech pasará a la historia –si las carambolas no lo impiden– como el enterrador de Francia. La derrota ante México –que marcó un gol en fuera de juego y el otro, de un penalti muy discutible– lleva al seleccionador francés, de origen catalán y carácter indómito, a la guillotina. Ya estaba sentenciado desde hace meses, e incluso la Federación pensó en echarlo cuando se consumó la clasificación, tras el triste partido ante Irlanda, en donde la mano de Henry meció la cuna del pasaporte a Suráfrica.Los dirigentes franceses debieron pensar que era mejor que Doménech acabase el ciclo y que un nuevo técnico para después del Mundial daría otro aire a los «bleu». Y mientras el seleccionador se cargaba a Benzema y a otros jugadores se anunciaba desde París que Laurent Blanc sería su sustituto. Se preservaba al ex jugador del Barcelona del amargo cáliz mundialista para que cuando llega al cargo lo haga con las manos libres, plenos poderes y sin hipotecas.A Doménech el Mundial debía servirle como reivindicación. En Francia no se confiaba en él, pero siempre quedaba la esperanza de que Ribéry, Malouda o Diaby le dejaran en mala lugar. Sin embargo, el empate ante los uruguayos ya fue mal presagio. El equipo acusó la responsabilidad, los años en algunos jugadores y la falta de recursos para solucionar los problemas en ataque. El partido ante los aguerridos chicos de Javier Aguirre ratificó lo esperando y Francia nunca tuvo capacidad de reacción tras el tanto de «Chicharito» Hernández, cuyo abuelo ya le había marcado a los franceses en el Mundial de Suiza (1954). Después llegó el penalti y la desesperación. Ni un minuto a Henry, ni un halo de esperanza y un «estoy abatido, no sé qué decir», palabras de Doménech, cuando ya en Francia se afilaban los cuchillos de la crítica para calificar a la selección de «patéticos, lamentables e impostores».«Es el momento de felicitar a Raymond Doménech por todo lo que ha aportado a los ‘‘bleus'', particularmente en estos dos últimos años, con una contribución que oscila entre poco y nada», comentaba con socarronería el diario «Le Parisien». En su titular puede leerse «¡Lamentable!», y señala el diario que los «patéticos bleus» fueron dominados en todas las fases del juego.¿El gran culpable? Para la mayoría de los franceses el «brujo» Doménech es el enterrador del equipo, de una selección que ha acudido a Suráfrica autoderrotada y que en dos partidos no ha dado ninguna señala positiva. «Está claro que queremos, pero algo no funciona», afirma el abatido entrenador. Dentro de un mes será Blanc el que tendrá que poner en funcionamiento la «máquina azul» para que Francia vuelva a la élite. A él le toca el relevo generacional.

Los reproches de Zidane El ex jugador francés Zinedine Zidane volvió a criticar al seleccionador Doménech por el equipo que alineó ante México y le recriminó que había dejado Yoann Gourcuff en el banquillo cuando es un jugador de alta calidad y con capacidad de creación. «El entrenador tomó esa decisión y yo no estoy de acuerdo con ella. Estoy muy decepcionado porque Francia no hizo un solo disparo a gol y eso es lo último que podíamos esperar».El ex jugador del Madrid reconoció que México fue un mejor. «Fueron superiores, especialmente, en el plano físico». Acusa al técnico de no haber sabido armar un equipo fuera de las individualidades. »didualid