Ángeles flamencos

Hedonismo, sensualidad, fantasía y mucho «glitter» se dan la mano en «It's showtime!», un espectáculo hiperbólico, exagerado y vital que arrasó el miércoles en el Regiment Armory de Nueva York. Allí, Victoria's Secret presentó su colección de ropa interior para Navidad y su ejército de despampanantes ángeles, que, con un único batir de sus faraónicas alas o una vuelta de su arquitectónico atrezzo, traen la fantasía al «front row» de cada año. En su tradicional desfile se dan cita las «top models» internacionales más deseadas y unos diseños cargados de purpurina, explosiones de color, aplicaciones y fuerza derrochadora. En esta ocasión se unió además una inspiración española que tiñó de pasión el taconeo de las modelos.

Candice Swanepoel fue la encargada de abrir la primera de las siete partes del desfile. Con «Ballet» por título, los ángeles danzaron vestidas de tul, plumas y unas artísticas alas en forma de mariposa. Los «Super Angels» trajeron lo mejor del cómic y los héroes de acción a ritmo de Kanye West, que puso música en directo al contoneo de Adriana Lima, mientras los colores neón y las letras XXL se fundían con el rap de Jay-Z. El toque flamenco lo puso el desfile de «Passion», donde los protagonistas fueron los capotes, las mantillas y los abanicos. Eso sí, versionados en tonos flúor y capitaneados por Alessandra Ambrosio.

Miranda Kerr, la feliz esposa de Orlando Bloom, volvió a subirse a los imposibles tacones tras dar a luz el año pasado. Ella lideró a los «Angels Aquatic», que, con el mar como inspiración, llenó la pasarela de conchas, flecos, pedrería y cristales de Swarovski que brillaron bajo la voz de Maroon 5. Doutzen Kroes protagonizó el decorado de «I put a spell on you», que mostró diseños dieciochescos propios del Romanticismo con el encaje, los paraguas y los camafeos como compañeros de viaje. Luces de neón por alas y los colores más fosforescentes de la paleta, las maniquíes bailaron al son de Nicki Minaj en el «show» «Club Pink». Erin Heatherton y Karlie Kloss contonearon sendos modelitos y dieron paso así al desfile final, en el que todos los ángeles bailaron, saludaron y lanzaron sus famosos besos mientras el confeti y los globos animaban la fiesta de la moda lencera.