Afganistán
España inicia el camino para salir de Afganistán
«No estamos en Afganistán para quedarnos». Ésas fueron las palabras que Zapatero dedicó a las tropas españolas, en su viaje relámpago al país asiático del pasado sábado. Apenas 72 horas después de sus palabras, el primer batallón de infantería afgano instruido por militares españoles, llegó ayer a la provincia de Badghis, para reforzar la seguridad de la región
Continúa de esta forma el proceso de afganización del país, que debe desembocar en la retirada de la Fuerza Internacional de Asistencia para la Seguridad, y con ello de las tropas españolas.
El batallón, formado por 569 militares afganos y 49 efectivos del Equipo Operativo de Asesoramiento y Enlace (OMLT), llegó a la base de Qala-i-Now procedente de Kabul, tras recorrer 1.300 kilómetros. Parte de este batallón se instalará en el nuevo acuartelamiento del Ejército Afgano en Qala-i-Now, junto a la base española «Ruy González de Clavijo», financiada con 14,5 millones de euros por España. El resto de la compañía se trasladará hasta los puestos avanzados de Muqur y Ludina, acompañados en funciones de mentorización por miembros de la OMLT.
El contingente español desplegado en el oeste del país, en concreto en la provincia de Badghis, está contribuyendo a la formación de nuevas unidades del Ejército Afgano. El objetivo es que España instruya para dentro de un año a 2.000 militares afganos, de los 40.000 que se necesitan para cumplir el objetivo global de la ISAF. O lo que es lo mismo, uno de cada 20 unidades afganas, habrán sido adiestradas por el Ejército español para que avancen en el proceso de afganización y poder realizar así la transferencia de seguridad a las autoridades del país.
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