Bilbao

El juez desestima la demanda de ACS para entrar en el consejo de Iberdrola

La sentencia estima que existe un conflicto de intereses entre las empresas

ACS, compañía que preside Florentino Pérez (a la izda.), recurrirá la sentencia. Junto a Pérez, Ignacio Galán, presidente de Iberdrola
ACS, compañía que preside Florentino Pérez (a la izda.), recurrirá la sentencia. Junto a Pérez, Ignacio Galán, presidente de Iberdrolalarazon

Madrid- El Juzgado de lo Mercantil número 1 de Bilbao ha desestimado la demanda con la que ACS intentaba acceder a un puesto en el consejo de administración de Iberdrola, decisión que la constructora recurrirá. La compañía que preside Florentino Pérez anunció que presentará ante la Audiencia Provincial de Vizcaya una apelación. ACS tiene un plazo de cinco días hábiles para recurrir la sentencia, que da por válidos los argumentos esgrimidos por la última Junta de Accionistas de Iberdrola para negar la entrada en su Consejo a un representante de la constructora.

El juez ha apreciado que entre ambas empresas existe «un conflicto de intereses», ya que las dos compiten entre sí en dos áreas de negocio «estratégicas»: la ingeniería técnica y las energías renovables. Según Iberdrola, las inversiones realizadas por ACS en su negocio verde confirman su interés en esta área, pero la constructora afirma que las renovables solamente representaron el 1,2 % de las ventas totales y un 0,91 % de sus beneficios en 2009. ACS puso a la venta en noviembre todos sus activos de energías renovables. Sus representantes legales explicaron en el juicio que si se mide la voluntad de una empresa por sus inversiones, la mayor que ha efectuado es la realizada en Iberdrola, por lo que ACS «es la más interesada en que se genere valor para los accionistas» de la eléctrica.

Por el contrario, Iberdrola sostiene que la constructora, que con una participación del 20,2 % es su accionista mayoritaria, solamente busca «chupar valor y beneficio» de la eléctrica.

La sentencia afirma que la constructora y la eléctrica no sólo compiten en el mercado de las renovables, sino que además también lo hacen en «el desarrollo del coche eléctrico, en los servicios de ahorro energético y en sus relaciones comerciales como cliente/proveedor».

Por estos motivos, el juez considera que, si Iberdrola incluyera en su máximo órgano de gobierno a un consejero que «a la vez es competidor», esto podría acarrearle «perjuicios derivados de la fuga de información».