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«Street View»: estalla una nueva guerra por la privacidad en Internet

«Street View», el callejero fotográfico de Google, no gana para polémicas. Después de las críticas por parte de gobiernos como el español por recoger supuestamente datos de domicilios particulares vía wi-fi, ahora Alemania calcula que habrá que borrar las imágenes en detalle de unos 200.000 edificios. Por si fuera poco, se abre un nuevo frente: los «foto-activistas» planean publicar en la Red las imágenes de los edificios y casas que elimine Google.

Polémica por las fotografías de Google Street
Polémica por las fotografías de Google Streetlarazon

«Debemos aplicar las mismas normas que en el mundo real, como nuestro derecho a tomar fotos panorámicas o en espacios públicos», dice el fotógrafo alemán Mejor Jens. Se abre un frente más para el camino de espinas que recorre Google en la implantación de su callejero gratuito por todo el mundo.

Jens y otros 200 «activistas» avivarán aún más el debate sobre Internet y la privacidad. Las imágenes de los edificios serán colgadas en «Google Picasa», un servicio que permite, además, integrar esas fotos en los mapas de Google, sacando así del anonimato a los edificios que habían sido pixelados por el gigante norteamericano.

De este modo, Jens pretende escanear los edificios y luego ponerlos en Internet aun en contra de la voluntad de los propietarios.

Vacío en la legislación

La legislación será otro de los escenarios de la cruenta guerra que se avecina entre los activistas que desenmascaran los edificios, los ciudadanos celosos de su propiedad y las autoridades responsables de lugares especialmente protegidos como juzgados, instalaciones militares o escuelas.

En Francia, por ejemplo, no es posible tomar una foto de una casa si es el tema principal de la imagen es el edificio. La ley es aún más severa si se pretende hacer dinero con la imagen en cuestión. En el caso de «Google Street View» la «trampa» sería determinar que son las calles, y no las casas, los objetivos de las fotos.

En Alemania, donde se ha suscitado la polémica más mediática, se puede fotografiar una vivienda si se hace desde un terreno público y ninguna persona es el sujeto principal de la imagen. En cualquier caso, Google ha ofrecido a través de un formulario la opción de eliminar las viviendas según lo soliciten los propietarios.

Algo más que fotos

El conflicto entre el Gobierno alemán y Google ahora tendrá como invitados a los fotógrafos contrarios a la «censura». Pero lo cierto es que el conflicto principal se desató al conocerse que los coches que recogían imágenes de las calles de las ciudades iban equipados con un sistema que recolectaba las señales wi-fi de domicilios particulares. Como respuesta, Google propuso borrar los datos almacenados ante testigos.

Varios países, entre ellos España, exigen conocer exactamente qué clase de datos se habían almacenado. El Ejecutivo alemán cuenta incluso con el apoyo judicial a su demanda. Puede que el callejón en el que se ha metido Google con su Street View no tenga salida de aquí a unos meses.