Literatura
Matute planea una nueva novela y defiende la grandeza de la literatura
La escritora, que se define como «una mujer de proyectos», ofreció una charla en Murcia
MURCIA- Vivaz, conversadora, enérgica, con ojos curiosos y manos inquietas. A sus 86 años, Ana María Matute conserva la inocencia de esa niña que fue, de esa pequeña que comenzó a escribir a la temprana edad de cinco años. La escritora, que visita Murcia con asiduidad, ofreció ayer la charla «La historia interminable», dentro del XV ciclo Los Cervantes en Murcia.
Matute, que recibió el prestigioso galardón en 2010, aseguró que continúa siendo «una mujer de proyectos» y anunció que después de Navidad comenzará a trabajar en su próxima novela, de la que no quiso desvelar ningún dato porque al igual que un perfume abierto, «se evaporaría». Nostálgica, afirmó que le apasiona la literatura y «la vida que se me va». «La vida es irrecuperable», sostuvo al tiempo que defendió que la literatura «hace más grande al ser humano» y le da pautas para «saber vivir». En su caso, escribir es algo que no puede evitar. La literatura es una forma de ser, yo vivo por, con y sobre todo en la literatura», manifestó. «No he hecho otra cosa en mi vida que escribir. No sé qué lugar ocupo yo dentro de la literatura, pero sí se qué lugar ocupa la literatura en mí: todo», enfatizó. Devoradora de novela negra, confesó que nunca se atreve con este género porque, aunque le divierte mucho, «no tengo cerebro para eso, soy más romántica». Matute confesó que añora «la juventud física, aunque la mentalidad no». «El tiempo me ha hecho más vieja y arrugada, pero me ha dado más que me ha quitado», añadió. La autora de «Paraíso inhabitado» confesó ser «una miedosa compulsiva». «Tengo miedo a todo, pero a veces es bonito por el misterio que implica». Sobre la posibilidad de que los lectores puedan leer sus memorias, indicó que «no tengo intención de escribirlas, porque mi vida es mía». Matute señaló que el libro con el que más disfrutó fue «Olvidado rey Gudú» (1996), mientras que sus preferencias como lectora se centran en los cuentos de Antón Chéjov. Respecto a los clásicos, sentenció que «Caperucita Roja es el personaje más tonto de toda la literatura». «Todos nos hubiésemos ido en algún momento con el lobo» y criticó que lo confundiese con su abuela. Creyente en las hadas de la mitología, defendió que «la imaginación nos hace libres, aunque a veces la libertad es un estado de conciencia».
En cuanto a la actualidad política, la escritora aseguró que le interesa de forma privada e insistió en que «el escritor puede hacer labor social, pero siempre sin renunciar a la literatura». Respecto a la complicada situación económica actual, admitió que no entiende nada de lo que pasa y mostró su incredulidad ante la posibilidad de que «alguien lo comprenda». Matute confesó que le «preocupa mucho el estado de inquietud en el que nos encontramos» y añadió que «hay que ser muy insensible» para mostrar indiferencia. También manifestó que «soy escritora, no puedo opinar de todo porque hay cosas que ignoro».
✕
Accede a tu cuenta para comentar