Comunidad de Madrid

Duras críticas del PP nacional a la ayuda para mujeres vejadas por el franquismo

El consejero de Presidencia de Madrid, Francisco Granados, califica de «vómitiva» la iniciativa andaluza.

Rosario Soto, portavoz del PP-A, ayer en la sede de regional de los populares andaluces
Rosario Soto, portavoz del PP-A, ayer en la sede de regional de los populares andaluceslarazon

SEVILLA- Tan sólo un día después de que el Gobierno andaluz aprobara dar 1.800 euros a aquellas mujeres que prueben que fueron objeto de vejaciones entre los años 1936 y 1950 durante la Guerra Civil y el franquismo, el PSOE-A y el PP-A utilizaron la medida como arma arrojadiza contra el partido rival.
Las críticas más duras no han llegado de los populares andaluces, sino del consejero de Presidencia, Justicia e Interior de la Comunidad de Madrid, Francisco Granados, que ayer calificó de «vomitivo» que «se tase la dignidad de una mujer en 1.800 euros». Así, Granados consideró que «es una de las medidas más reprobables que ha visto nunca de un Gobierno». Por su parte, la secretaria general del PP, María Dolores De Cospedal, se mostró de acuerdo con algún tipo de compensación, aunque matizó que en la actualidad hay «muchas» que son objeto de violación y maltrato y no reciben «ninguna indemnización». En la misma línea que De Cospedal se posicionó la portavoz del PP-A, Rosario Soto, quien aseguró que su formación política ve bien «que se cierren heridas», pese a que concretó que el gasto presupuestario debe centrarse en los problemas de la «Andalucía del siglo XXI».
Estas declaraciones no han sentado nada bien en el seno de la Junta de Andalucía, y el consejero de Gobernación y Justicia, Luis Pizarro, exigió al secretario general del PP-A, Javier Arenas, que desautorice «inmediatamente» a De Cospedal, quien a su juicio, muestra «el rostro más reaccionario de la derecha española dentro del PP».
Para el portavoz del grupo socialista en el Parlamento andaluz, Mario Jiménez, el PP mantiene la actitud de «un partido acomplejado», por lo que debería «quitarse los complejos de la vinculación histórica que la derecha en España pueda tener con la derecha que en su momento gobernó durante la dictadura franquista». En este sentido, la consejera de Presidencia, Mar Moreno, indicó que el PP tiene que reconciliarse «con la memoria histórica y no demostrar que es un tema que les incomoda y les altera».
Las únicas críticas positivas a la medida han llegado de la mano del coordinador regional de IU LV-CA, Diego Valderas, que calificó el decreto de «oportuno y necesario», aunque abogó por mejorarlo e impulsarlo». Además, Valderas consideró que esta nueva medida debe llegar «a todos los sectores que se encontraron afectados y que no ha resuelto la Ley de Memoria Histórica».