Hillary Clinton acudirá a la cumbre de Sharm el Sheij y a la de Jerusalén

La reunión entre el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmud Abas será en la localidad egipcia el 14 de septiembre, como se anunció la semana pasada en Washington, pero al día siguiente las delegaciones se trasladarán a Jerusalén, según confirmó ayer a Efe un portavoz del Departamento de Estado.

El enviado especial de Estados Unidos para Oriente Medio, George Mitchell, también acompañará a la secretaria de Estado a la cita. El encuentro en Jerusalén tiene un gran simbolismo puesto que constituye uno de los elementos de fricción entre las dos partes. Los palestinos exigen que Jerusalén oriental sea la capital de su futuro Estado, mientras Israel ha expresado sus reservas a ceder territorio. Esta parte de la urbe, que incluye la Ciudad Vieja y la Explanada de las Mezquitas, fue tomada por Israel en 1967. El estatus de Jerusalén será por lo tanto uno de los temas que se tratarán en las negociaciones de paz que se reanudaron la semana pasada en Washington después de 20 meses congeladas.

«Concesiones dolorosas»
El día anterior del encuentro bilateral y directo entre Netanyahu y Abas en la sede precisamente del Departamento de Estado de Estados Unidos, el ministro de Defensa israeli, Ehud Barak, sorprendió con unas declaraciones en el periódico «Haaretz» en las que anunciaba la cesión por parte del Ejecutivo de Netanyahu de Jersualén Este como capital del futuro estado palestino.

El primer ministro israelí todavía no se ha pronunciado a este respecto pero sí ha expresado recientemente que para alcanzar el acuerdo de paz se tendrán que realizar «concesiones dolorosas» en ambas partes. Una declaración de intenciones que bien podría confirmar el anuncio realizado por el ministro de Defensa israelí.