Una conversación (imposible) entre Elsa Schiaparelli y Miuccia Prada en el Metropolitan

"Lo que llevas es lo que piensas. No debería ser algo externo, sino una parte de ti", ha dicho en muchas ocasiones Miuccia Prada que considera que la moda es un lenguaje instantáneo.

Todavía así, el diseñador alemán de Chanel Karl Lagerfeld, que habla en inglés con acento francés, siempre ha destacado que "los diseños de (Elsa) Schiaparelli nunca se hicieron para llevarlos en la calle". Ella misma reconoció, siempre en contra de maxi faldas y pantalones ajustados, en una ocasión que "en los tiempos difíciles la moda siempre es escandalosa".

Schiaparelli (1890-1973) trabajó en París desde los años 20 hasta que su casa cerró en 1954. Asociada con el movimiento Surrealista, creó piezas icónicas como el vestido "Tear"(lágrima, en inglés), el sombrero "shoe"(zapato) o el colgante "bug"(chinche). Mientras, Prada, de 62 años, que tiene una licenciatura en Ciencias Políticas y se hizo cargo del negocio de su familia en Milán en 1978, se centra en moda que refleja la ecléctica naturaleza del postmodernismo.

De esta forma, los comisarios del Museo Metropolitan prueban el más difícil todavía en la muestra de este año del Instituto de la Moda. En cada edición, deben superarse y mejorar la anterior. Y el año pasado tuvieron que alargar la de Alexander McQueen y los visitantes hicieron colas durante horas para ver la muestra.

En esta ocasión, la exposición, que se inaugura el 10 de mayo, explora las sorprendentes afinidades entre Elsa Schiaparelli y Miuccia Prada. Inspirado en el trabajo de Miguel Covarrubias "Impossible interviews"(entrevistas imposibles) en la revista "Vanity Fair"en los años 30, los comisarios Harold Koda y Andrew Bolton han orquestado la muestra "Schiaparelli and Prada: Impossible conversations"(Schiaparelli y Prada: Conversaciones imposibles).

Con la misma, imaginan cómo hubiesen sido las charlas entre estas dos icónicas mujeres de eras diferentes, que darán lugar al redescubrimiento del trabajo de las mismas.

"Dada la función del Surrealismo y otros movimientos artísticos en los diseños de Schiaparelli y Prada, parece que sólo es posible que se explore sus creaciones en el Met. Las colaboraciones de Schiaparelli con Dalí y Cocteau y también las de Prada han acercado la moda y el arte que redefine esta relación", indica el director del Museo Metropolitan Thomas P. Campbell.

Para celebrar la inauguración, el lunes tendrá lugar la gala benéfica del Instituto de la Moda del Museo, que tras el éxito de los últimos años es casi más importante que la propia exhibición. Este año la fiesta estará presidida por el fundador y consejero delegado de Amazon.com, Jeff Bezos, junto con la actriz Carey Mulligan, la diseñadora Miuccia Prada y la editora en jefe de Vogue Anna Wintour.

Los conjuntos icónicos de Schiaparelli y Prada serán presentados con vídeos de conversaciones simuladas entre las dos diseñadoras, dirigidas por Baz Luhrmann, centradas en cómo las dos mujeres exploran temas similares en sus trabajo con perspectivas diferentes.

"Juxtaponer el trabajo de Elsa Shiaparelli y Miuccia Prada nos permite explorar cómo el pasado ilumina el presente y cómo el presente da vida al pasado", reconoce Harold Koda.
La exposición costará de 90 diseños y 30 accesorios de Elsa Schiaparelli, de últimos de los años 20 hasta principios de los 50, y Miuccia Prada, de últimos de los 80 hasta el presente.

Procedentes de la colección The Costume Institute y el Prada Archive, así como otras instituciones y colecciones privadas, los objetos de la firma de ambas diseñadoras se organizarán en siete galerías temáticas: "Cintura arriba / Cintura abajo", "Ugly Chic", "Hard Chic, "Naïf Chic", "El cuerpo clásico", "El cuerpo exótico"y "El Cuerpo surrealista".

Además, los visitantes también podrán comprar el catálogo, que costará 45 dólares, realizado por los comisarios de la exposición de 308 páginas. El mismo cuenta con más de 200 imágenes "vintage"y nuevas fotografías del trabajo de las diseñadoras.