Chicago

Obama comparecerá tras victoria electoral para hablar sobre la economía

El presidente estadounidense, Barack Obama, comparecerá mañana ante los medios en la Casa Blanca, por primera vez tras su victoria electoral del martes, para hablar sobre crecimiento económico y cómo avanzar en un consenso para reducir el déficit público.

El presidente comparecerá sobre las 13:00 hora local (18:00 GMT) para hablar "sobre las acciones necesarias para mantener el crecimiento de nuestra economía y reducir el déficit", según anunció la Casa Blanca.

Obama expondrá sus puntos de vista sobre cómo evitar el "precipicio fiscal"en el que entraría Estados Unidos si republicanos y demócratas no acuerdan en el Congreso medidas para reducir el déficit a largo plazo antes de que acabe el año.

Está previsto que, en ausencia de un acuerdo bipartidista, en enero entrarían en vigor recortes automáticos en el presupuesto acordados en el verano de 2011 como medida de presión para desbloquear las negociaciones sobre el aumento del techo de deuda.

Esta reducción del gasto coincidiría con el fin de las exenciones impositivas de la administración de George W. Bush, algo que los expertos consideran que sería fatal para la primera economía mundial.

El presidente comparecerá ante los medios tres días después de su discurso de la victoria electoral en Chicago, donde marcó como una de sus primeras tareas del nuevo mandato la necesidad de afrontar un recorte del déficit y el equilibrio presupuestario.

Se espera que Obama también delinee lo que serán sus prioridades en materia económica para el nuevo mandato de cuatro años que comenzará en enero de 2013, cuando tomará posesión.
Ayer, el presidente de la Cámara de Representantes, el republicano John Boehner, se mostró abierto a entablar de nuevo conversaciones sobre el déficit, aunque mantuvo la posición republicana de no aceptar un plan que incluya subida de impuestos a los más ricos, como propone Obama.

Los republicanos controlan la Cámara de Representantes, mientras que los demócratas son mayoría en el Senado, lo que obliga a un entendimiento entre los dos partidos para desbloquear al Legislativo.