Zapatero «decepcionante como el mundial de Torres»

Bruselas- La Presidencia española ha sido una buena aliada de las instituciones europeas durante este semestre «complicado» y «de gran tensión», como coincidieron el presidente del Parlamento Europeo y de la Comisión Europea, Jerzy Buzek y José Manuel Durao Barroso. Estas manos tendidas de los jerarcas institucionales, ambos conservadores, fueron las únicas, aparte de las de su familia socialista europea, que se encontró el presidente español, José Luis Rodríguez Zapatero, en su repaso a la presidencia española ayer en la Eurocámara. La prioridad es que «no hubiera una sola queja, un solo roce» con las nuevas instituciones del nuevo Tratado, dijo Zapatero, quien se dio por satisfecho por haber respetado su posición en el campo de juego comunitario, lo que le valió el elogio de Barroso y Buzek por su «defensa del método comunitario» y su «compromiso europeo». Pero todos los grupos políticos recordaron a Zapatero que un partido no se gana solo conociendo las reglas y respetando las posiciones, sino marcando goles. «El semestre español es igual que el mundial de Fernando Torres, grandes expectativas pero decepcionante», dijo el liberal alemán Alexander Graff Lambsdorf, cuyo grupo había apoyado sin fisuras a Zapatero al inicio del semestre. Sin embargo, los mayores ataques llegaron por la banda económica, donde en algunos casos «ha estado clamorosamente ausente» dijo Francisco Sosa Wagner (UPyD), y en otros casos no ha podido culminar, como en el paquete de supervisión financiera, lejos de estar aprobado, aunque Rodríguez Zapatero lo dio por cerrado. Ha faltado liderazgo «porque somos parte del problema», resumió el popular Jaime Mayor Oreja.