Indianápolis
Un paso atrás para avanzar
Lorenzo volvió a los reglajes del año pasado para hacerse con la «pole»
La guerra fría en la que se ha convertido la lucha por el título en MotoGP va subiendo de intensidad. Pedrosa y Lorenzo, con Stoner a punto de operarse del tobillo en Australia, tienen muy claro quién es el enemigo. No hay ninguna duda, es un cuerpo a cuerpo de siete carreras empezando por la de hoy. Cada fin de semana va a ser un marcaje hombre a hombre en los tres entrenamientos libres, en el oficial y en la pelea por los puntos en juego.
Después de su exhibición en Indianápolis, Dani subió sus acciones durante la jornada del viernes y la mañana de ayer. Dominó con autoridad las sesiones demostrando que tanto él como su Honda pueden estar en el mejor momento de sus vidas. Mientras, Jorge sufría para encontrar el camino, se fue al suelo y su casco se llenó de dudas.
Tantas le rondaban que decidió dar un paso atrás para avanzar. «Hemos vuelto a la puesta a punto que realizamos el año pasado, la primera vez que rodamos en Brno con la 1.000 cc, y la verdad es que todo ha ido muy bien después de luchar mucho para sentirme cómodo sobre la moto. Con los cambios que hemos hecho, he conseguido de verdad empezar a disfrutar, pues podía derrapar más y mejor sin usar tanta electrónica. Sólo quería seguir en pista y rebajar una y otra vez los tiempos», explicaba el mallorquín, que se apuntó la «pole» batiendo el récord del circuito checo y mostrando un ritmo impecable para ganar en Brno.
Cambió la inercia para Lorenzo y lo hizo también para Dani, que se cayó a mitad de la sesión y tuvo que utilizar la segunda moto. A pesar de las dificultades, el catalán se agarró al tercer lugar de la parrilla y pondrá un precio muy alto a la victoria. «Sólo pude tirar al máximo para mejorar mi posición, pero creo que tenemos una buena puesta a punto».
Su margen de error es más estrecho que el de Jorge, ya que necesita recortar los 18 puntos que ahora tiene de desventaja. Sin Casey, será difícil que los dos primeros lugares del podio de aquí a final de curso no sean monopolio de los dos españoles, de los dos únicos candidatos a un título en el que cada punto cuenta.
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