La modelo que denunció por abusos al príncipe saudí pide acusar en Nóos

Madrid- La modelo española que denunció por abusos sexuales al príncipe saudí Al-Waled Bin Talal –un caso que fue archivado por la Audiencia Provincial de Palma de Mallorca el pasado 26 de marzo por falta de pruebas– ha solicitado al juez José Castro que acepte su personación en el «caso Nóos» como perjudicada. P. A. S. H. ha remitido un escrito al juzgado, a través de su abogado, Maximino Turiel, en el que pide al magistrado (que investiga el supuesto desvio de dinero público por parte de Iñaki Urdangarín y su ex socio Diego Torres a través del Instituto Nóos) que se le tenga por parte en el procedimiento como acusación particular. Según el letrado, existe un «interés legítimo derivado de la participación de los imputados en la empresa Mixta África». En esta sociedad inmobiliaria, que se dedica a construir viviendas baratas en África, Bin Talal posee un 29% del capital a través de Kingdom Zephyr Africa Management. Urdangarín entró en 2007 en el accionariado de la empresa con un uno por ciento a través de Aizoon, la sociedad que comparte con la Infanta Cristina.

En una providencia, el juez Castro instó ayer mismo a la interesada a que «acredite qué perjuicios ha experimentado» como consecuencia de los hechos investigados a fin de decidir si se acepta su petición. Según las fuentes consultadas, resulta improbable que el magistrado acepte su personación como acusación particular en el «caso Nóos». En la causa ya está personado como perjudicado el Gobierno balear (por los presuntos fondos desviados del Ejecutivo autonómico con los convenios firmados con Nóos).

La modelo denunció que el príncipe saudí había abusado sexualmente de ella en agosto de 2008 a bordo de un yate, «Turama», fondeado en aguas de Ibiza, tras haber sido drogada en una discoteca en la que había conocido a Al-Waled horas antes.

El Juzgado de Instrucción número 3 de Ibiza abrió diligencias por un delito contra la libertad sexual. Tras ser archivado el caso, la Audiencia Provincial de Palma ordenó su reapertura y la citación como imputado del denunciado. Pero en diciembre del pasado año, la Fiscalía pidió el sobreseimiento por falta de pruebas. El Ministerio Público esgrimió un informe forense realizado el 14 de agosto de ese mismo año que ponía de manifiesto que no existían «lesiones físicas ni lesiones genitales que puedan acreditar una supuesta agresión sexual». El abogado del príncipe Al-Waled esgrimió que en esas fechas su cliente estaba en Francia con su familia.

La Audiencia Provincial decidió el pasado 26 de marzo archivar el caso por falta de pruebas al concluir los magistrados que no se podía establecer «con alguna solidez y aun indiciariamente lo que ocurrió» en el yate y subrayaba que «los ahora recuerdos nítidos y afirmaciones aplastantes no cuadran con las primeras versiones y el estado de inconsciencia o semiinconsciencia en el que dijo estar sumida». Por tanto, la Sala mantenía que no había dato alguno que permitiese imputar el delito al príncipe saudí «con alguna fiabilidad» ni involucrarle en los «imprecisos hechos» denunciados por la modelo.