Peter Gabriel sinfónico y descastado

«Hay que tomarse su tiempo para averiguar quién eres realmente; a mí me llevó 20 años». Esta frase, extraída de una de las escasas entrevistas concedidas por Peter Gabriel con motivo de la presentación de su último disco, resume de forma nítida la trayectoria artística y vital del músico británico. Fundador de Genesis en 1967, abandonó la banda en 1975, y emprendió una carrera en solitario no siempre con el mismo nivel de acierto, aunque dominada en todo caso por la inquietud, pasando del rock progresivo a convertirse en uno de los pioneros en la fusión del pop con la «world music».

A esas mismas coordenadas responde ahora la gira «New blood», que llegará a España la próxima semana (el miércoles 22 en el Palacio de los Deportes de Madrid y el jueves 23 en el Palau Sant Jordi de Barcelona) y en donde el autor de «Passion» se presenta con un formato inédito en su carrera: nada de guitarras ni baterías, ni tampoco elementos electrónicos, sino que estará acompañado por una orquesta sinfónica bajo la batuta de Ben Foster y el concurso vocal de su propia hija, Melanie Gabriel, y de la delicada cantautora noruega Ane Brun.

Radiohead «pasa» de él
El experimento no es más que la puesta en escena de su trabajo más reciente, «Scratch my back», con el que rompía ocho años de silencio discográfico. Un álbum que recrea, de manera mayoritariamente oscura, canciones de artistas tan dispares como David Bowie, Lou Reed, Arcade Fire, Bon Iver, Talking Heads, The Magnetic Fields y Regina Spektor, propuesta que ha sido recibida con opiniones enfrentadas por parte de sus seguidores, aunque con una respuesta de público más que notable a lo largo de la gira. «En lugar de emprender un proyecto de forma pasiva, cogiendo sin más los temas de otros, quería ver si podía interactuar con quienes habían escrito estas composiciones, lo que requería que ellos también se implicasen en esto», explicaba en una conversación con el diario «The Guardian».

Para ello, la segunda parte de este camino de ida y vuelta pasa por la publicación –coincidiendo con cada ciclo lunar, a la espera del lanzamiendo del disco completo– de las versiones que estos mismos artistas han hecho de las canciones de Peter Gabriel, estableciéndose un diálogo que no siempre ha sido fructífero: sí respondió de inmediato Lou Reed, al igual que el grupo Elbow o Arcade Fire, mientras que otros, como David Bowie (sustituido por Brian Eno) o Radiohead, prefirieron pasar de largo ante la invitación, polémica incluida en el caso de la banda liderada por Thom Yorke, de la que el ex Genesis tomó «Street spirit (fade out)»: «En principio, él iba a hacer una versión de "Wallflower", pero no he oído lo que piensa de mi trabajo. No sé si le gusta o lo odia, aunque puede que tenga una pequeña pista: dábamos a los artistas un código para que escucharan las canciones, registrándose el número de veces que lo habían hecho. Creo que Yorke sólo lo hizo en una ocasión, lo que no es una buena señal», comentaba Gabriel en la revista especializada «Mojo», en donde también echó la vista atrás para decir, respecto a su pasado en Genesis, que había sido como «estar en el ejército, sin capacidad para tener cualquier tipo de compromiso con ninguna otra cosa». Porque a Gabriel no le gusta mucho que le recuerden su pasado en la banda junto a Phil Collins. Incluso el pasado mes de marzo renunció a presentarse junto a sus ex compañeros de formación para ingresar en el Rock & Roll Hall of Fame por «problemas de agenda» después de rechazar varias veces la posibilidad de una reunión temporal de la banda.