Sube la demanda de blindados de los países de Oriente Medio

Las revueltas populares que han sumido a Egipto en una grave crisis política han hecho cundir el pánico en los países vecinos del Golfo Pérsico. Así lo muestra el inhabitual aumento de demandas provenientes de aquella región según el fabricante francés de vehículos militares, Panhard, que ha visto en pocos días incrementarse sus pedidos coincidiendo con el enconamiento de las protestas anti-Mubarak. Y con una premura que contrasta con las costumbres habituales en la zona en lo que a compra de equipos de seguridad se refiere.

No es que las naciones del Golfo estén engrosando su arsenal de guerra, sino más bien reforzando su capacidad material para hacer frente a eventuales repercusiones alentadas por las manifestaciones en Egipto –como ya ha sucedido en Yemen– y poder así mantener el orden público en caso de sublevación. De ahí el interés que estarían mostrando no tanto por carros de combate como el americano Abraham, el más desplegado en las calles de El Cairo por el Ejército egipcio, como por blindados más ligeros del tipo VBL (Vehículos Blindados Ligeros).

«Las peticiones de presupuestos nos llueven desde el viernes», reconocía ayer al diario económico «Les Echos» el presidente de la compañía gala, Christian Mons, que cifró la demanda potencial en «varios cientos de vehículos». Un interés que esperan poder ver confirmado en los próximos días en el Salón Idex de armamento que se va a celebrar en Abu Dhabi, en los Emiratos Árabes Unidos.

Esta gama, fabricada por Panhard, especializada en este sector desde que en 1967 abandonara la producción de turismos, es utilizada actualmente por los ejércitos de dieciséis países y desde hace casi dos décadas en distintas operaciones internacionales en África, Kosovo, Líbano y Afganistán, para desarrollar fundamentalmente labores de reconocimiento, aunque también están provistos de defensa anti carros y anti aérea.

Entre los clientes de la armamentística gala se encuentra también Libia, vecina de Egipto, que tendría apalabrados 120 blindados de combate (VBR) para la guardia de fronteras, o el Gobierno ruso que estaría negociando la compra de medio millar de carros ligeros.