La oposición ausente por Iñaki Zaragüeta

Nadie puede negar que Alberto Fabra y su Gobierno no se enfrentan al escenario deseado. La cosa está demasiado complicada como para disfrutar de una responsabilidad anhelada desde el momento que eligieron la política como actividad personal. Como dice mi amigo Rogelio, el presidente de la Generalitat conocía las dificultades del momento -a su nivel ya las tenía como alcalde de Castellón-, pero sus sensaciones se fueron agravando conforme ha transcurrido el tiempo, ha conocido la realidad de la Comunitat y se ha visto obligado a determinadas decisiones.

Aún así, goza de una prerrogativa un tanto sorprendente, la ausencia de la presión por parte de la oposición, especialmente del PSPV, que sigue viviendo al margen de la preocupación ciudadana. Así volvió a demostralo ayer en la comparecencia del conseller de Hacienda, José Manuel Vela, para explicar la adhesión de la Generalitat al Fondo de Liquidez Autonómico. En lugar de centrarse en analizar el contenido del acuerdo con el Gobierno central y plantear sus alternativas, se obsesionaron en la denominación, en que se trataba de un «rescate» a la Comunitat por parte del Estado y negar que el concepto de un plan de ayudas financieras para todos.

Ahí está el «quid» de la cuestión. Si tuvieran razón, el rescate será para todas las autonomías, no sólo para los valencianos. Ya lo han decidido también Cataluña y Murcia y lo harán 16 de 17.
Hay políticos que aún cobran demasiado, si se pudiera medir la productividad que demuestran. Así es la vida.
Así es la vida.