La federación de Barcelona avisa al partido que quiere a Hereu de candidato

Con las encuestas en contra y la popularidad a la baja, el alcalde, Jordi Hereu, y su equipo, se sacaron revulsivos de la chistera para intentar remontar, como una consulta para reformar la avenida Diagonal o la candidatura de unos Juegos Olímpicos de Invierno para 2022. Ambos planes fracasaron y pusieron en duda la figura del alcalde hasta el punto de que dentro de la ejecutiva del PSC surgieron voces hablando de relevo. Lo más doloroso para Hereu sería el silencio de José Montilla.

La eterna precampaña
Entonces, el PSC pospuso la decisión sobre si mantener a Hereu como candidato al 29 de noviembre. Aunque la renuncia de Montilla a liderar la oposición, tras la derrota electoral del PSC, acaparó ayer todos los focos de atención, los socialistas recuperaron el debate. Los dirigentes de la federación socialista de Barcelona se apresuraron a entregar su aval al candidato Hereu. El primer secretario de la federación, Carles Martí, afirmó que «no hay lugar para especulaciones en relación con la candidatura socialista al Ayuntamiento de Barcelona: el candidato será el mejor, Jordi Hereu, porque es quien tiene el apoyo de su partido y el alcalde que necesitan los barceloneses». La federación de Barcelona no va a permitir que el «aparato» imponga a su candidato.

Pero la derrota que sufrió el PSC el domingo es irrefutable. Ha obtenido el 18 por ciento de los votos. CiU no sólo le dobla, le saca más de 18 puntos de ventaja.Y el PP le pisa los talones y le ha superado en Sarrià-Sant Gervasi y Les Corts, además de recortar distancias en los barrios obreros. El PSC, ante la obligación moral de salvar Barcelona, puede improvisar un cabeza de cartel. Pero el remedio puede ser peor que la enfermedad. Entre otros, con el relevo de Hereu se corre el peligro de liquidar a toda una generación.