Málaga

Marcelinho Huertas da la victoria al Caja Laboral

El Caja Laboral se ha impuesto este sábado al Unicaja Málaga (76-74) en un partido muy igualado que abría la decimonovena jornada de la liga ACB, y que se ha decidido en el último segundo gracias a una canasta sobre la bocina de Marcelinho Huertas, que mantiene cuartos al equipo de Dusko Ivanovic. 

Dos grandes del baloncesto español en crisis de juego y resultados se enfrentaban con la necesidad de volver a encontrar la senda de la victoria, ya que vitorianos y malagueños arrastraban una racha idéntica en la que habían perdido seis de los últimos nueve partidos en la liga ACB.

Además, los de Dusko Ivanovic habían derrotado a los andaluces hace apenas una semana en la Euroliga y el histórico de enfrentamientos en el Buesa Arena era demoledor para el Unicaja, donde ha perdido los últimos ocho partidos.

El choque empezó con un Caja Laboral lanzado gracias a Fernando San Emeterio, que en el primer cuarto anotó 11 de los 20 puntos de su equipo. El Unicaja, por su parte, se mostró muy flojo en defensa y desacertado en el lanzamiento, lo que propició una desventaja de 11 puntos con los locales en lo que parecía iba a ser su cuarta derrota consecutiva.

Pero, en el segundo cuarto todo cambió. Los andaluces cambiaron el ritmo del encuentro a base de una defensa mucho más contundente que en los primeros diez minutos y anotando con facilidad, triples incluidos, sobre todo de Tripkovic, que hizo tres de tres en este cuarto. El Unicaja no sólo remontó la diferencia, sino que se fue al descanso liderando el marcador (37-39).

La segunda mitad empezó como lo había hecho el partido, con muchas imprecisiones en ambos conjuntos. Sin embargo, poco a poco empezaron a llegar las canastas. En este intercambio destacó el brasileño del Baskonia, Marcelinho Huertas, que encadenó dos triples seguidos y fue autor de algunas buenas acciones personales que permitieron al Caja Laboral llegar al final del tercer cuarto con una ligera ventaja (53-50).

Canasta de infarto
Los de Chus Mateo, que dirigía su segundo partido al frente del Unicaja, vieron como los visitantes iban distanciándose poco a poco en el luminoso al principio del último cuarto. Los hombres importantes del equipo vasco, cómo Batista, Teletovic y, por supuesto, San Emeterio, máximo anotador del partido, asumieron la responsabilidad.

Pero, el Unicaja estaba dispuesto a vender cara la derrota y gracias a su nuevo fichaje, Gerald Fitch -que hizo un gran partido- no dejaron que el Caja Laboral consiguiera una ventaja definitiva. Con menos de un minuto de partido por jugar, el norteamericano anotó un triple que empataba el partido a 74.

Los de Vitoria iban a tener la última posesión. Marcelinho fue el encargado de jugarse la canasta definitiva, pero después de fallar en el primer intento, el propio jugador brasileño recogió el balón y anotó una bandeja sobre la bocina que dio la victoria a un Caja Laboral muy necesitado.