Empanadas a dos manos

Es un clásico de Retiro, un local diminuto que acoge una pequeña barra y cuatro mesas. En Trenque-Lauquen, como la ciudad argentina, la oferta no es excesivamente amplia, pero de categoría y a precios económicos. La carta se divide en ensaladas, pizzas y empanadas argentinas, horneadas al momento y hechas de fino hojaldre, probablemente las mejores de la capital. Nos gustó la de carne, muy sabrosa, tanto como la de espinacas. Las preparan de queso y cebolla, de jamón y queso, de roquefort y caprese, también espectacular. Una advertencia antes de continuar: sepa que sirven unos pisco sour únicos. Queda dicho, por eso de que el trago puede resultar un acompañante diez de estos manjares, que puede degustar en casa si lo desea.
Muy recomendables son las pizzas, que se sitúan muy lejos de esos bocados grasos tan típicos de los locales de comida rápida. Masa fina y crujiente, artesanales y hechas a la piedra, su aspecto y sabor recuerdan a las ofrecidas en los clásicos locales de Río de la Plata. En cuanto a los ingredientes, son frescos y de calidad.

Ají molido
En la carta no faltan las de siempre, como la margarita o la napolitana, la calabresa –con ají molido, chorizo, mozzarela y tomate, una curiosa combinación de sabores–, o la de bacon, con pimientos del piquillo. Incluso los poco amantes del queso poseen su apartado. De él, nos quedamos con la especialidad porteña, la «fugazza», preparada con cebolla y orégano, aunque la «angulo pascual», con gulas, ajo y guindilla, es otra original propuesta. Lo suyo es combinarlas con alguna ensalada, aunque cierto es que son prescindibles, pero, si se le antojan, preparan la «pochita» (huevo duro, tomate, perejil y aceite de oliva virgen) y la «roja» (remolacha, manzana golden, piña y mayonesa). En cuanto a los postres, tampoco fallan. Pruebe el crêpe de dulce de leche con helado de vainilla.

ESPECIAS DE DISEÑO
NAMASTE
Pimienta Sichuan, azúcar de caña integral y sésamo de cultivo ecológico comparten estantería en este paraíso de las especias con otras mezclas, procedentes de distintos países y orígenes, entre ellas, el chimichurri, el mole poblano y el tandoori. Pregunte por los especieros en acero corten y policarbonato hechos a mano y por las cestas de Navidad personalizadas.
Dónde:www.especiasnamaste.com
Precio medio: desde 5 euros.
 

De «afterwork»
JUAN BRAVO 25
Desconectar de la jornada laboral y apuntarse al «afterwork» es una tendencia gastronómica que nos encanta. Las opciones son variadas, pero resérvese la tarde de los jueves para hacerse con una mesa en la terraza de invierno de Juan Bravo 25. Proponen una docena de ostras de la casa Sorlut y una botella de champán Taittinger por 60 euros o una copa y una ostra por ocho. Si se queda con hambre, pida la carta de pinchos, los sirven en horario ininterrumpido.
Dónde: C/Juan Bravo, 25. Madrid. Tel. 91 411 60 04.