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Las aficiones contra el 29-N

Los futbolistas se han resignado a jugar el clásico el lunes; los políticos están encantados con la fecha; la televisión, también... Sin embargo, ambas aficiones se muestran descontentas. Joaquín Gay de Montella, socio del Barcelona número 96.114, cree que «desprestigia un poco el partido ponerlo un día entre semana».

La Razón
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«Además, perjudicas mucho al público y a las peñas del Barcelona que vienen desde lejos, pero, por otro lado, en el fondo es la decisión más lógica porque el sábado hubiera estado demasiado cerca del duelo ante el Panathinaikos y el domingo, por las elecciones», comenta para LA RAZÓN. «A mí me gusta un Barcelona-Real Madrid el sábado», opina.

Antonio del Val Gómez, socio del Real Madrid número 43.759, también está en contra del día elegido. Este socio discrepa de la fecha en que el ejecutivo catalán fijó las elecciones. «Se pusieron en esa fecha cuando ya se sabía el calendario de la Liga para esta temporada». Al socio del Real Madrid le disgusta que se juegue un lunes «porque un partido tan grande no se puede poner entre diario». «Se desluce», dice. No le cabe la menor duda de que, sea el día que sea, el estadio se va a llenar y la audiencia televisiva no menguará apenas, «pero si ya es malo –explica– que el partido no sea en abierto, cuando debiera ser, pues es de los que tendría que ser considerado como de interés general, nadie ha pensado en el trastorno que le ocasiona al espectador que no dispone del canal por el que se transmite el partido». «No es lo mismo echarse a la calle un sábado para ver el partido en un local, o un domingo, que, aunque al día siguiente trabajas, estás descansado del fin de semana, que el lunes», añade. Para el socio del Madrid, además, que sea el 29-N es «antojo de los políticos, intereses televisivos y cabezonería del Barcelona», y se suma a la opinión de Mourinho de que no se juegue en sábado. «El Madrid ha jugado partidos con dos días de descanso y no ha pasado nada».