Romney lidera los sondeos para las primarias republicanas de New Hampshire

En concreto, Romney cuenta con un 37 por ciento del apoyo, seguido del empresario Herman Cain, el único precandidato republicano negro, con el 12 por ciento, según el sondeo elaborado por la Universidad de New Hampshire para la emisora WMUR. Muy por detrás estarían Ron Paul (9 por ciento) y Jon Huntsman (8 por ciento).

Las primarias de New Hampshire son tradicionalmente las primeras de la carrera por la nominación y podrían celebrarse en enero o incluso en diciembre, si otros estados adelantan sus primarias. Marcan tendencia por ser las primeras primarias, pero también es cierto que el Partido Republicano de este estado es tradicionalmente moderado, por lo que candidatos del Tea Party como Rick Perry o Michele Bachmann no tienen apenas seguidores.

En el sondeo, Perry logró apenas un 4 por ciento del apoyo, empatado con Newt Gingrich, mientras que la congresista Bachmann apenas se haría con el 2 por ciento entre los 345 votantes republicanos entrevistados para el estudio entre el 26 de septiembre
y el 6 de octubre.

Mientras, Romney continúa su campaña, esta vez en Washington, donde ha participado en el Encuentro de Votantes con Valores, un grupo conservador cristiano. Romney ha moderado relativamente su tono y ha hecho un llamamiento a un "debate cívico y respetuoso".

El precandidato responde así a las críticas de sectores cristianos que denuncian su fe mormona por considerarla ajena al cristianismo. "El lenguaje ponzoñoso no ayuda a nuestra causa (...). Las bendiciones de la fe conllevan la responsabilidad de un debate cívico
y respetuoso", ha afirmado Romney.

Sin embargo, el siguiente orador que ha tomado la palabra, el director de la Asociación de la Familia Americana, Bryan Fischer, ha lanzado ataques velados a las creencias del precandidato y ha dicho que solo un "auténtico"cristiano debe ocupar el cargo de presidente de Estados Unidos.

El núcleo del discurso de Romney ha sido el ataque al matrimonio homosexual y a la legalización del aborto. "Habla bien de nuestro país que casi la totalidad de los americanos reconocen el aborto como problema. La ley puede que lo legalice, pero nadie lo considera bueno", ha señalado.