Viena

Irán tiene uranio enriquecido para dos bombas atómicas según la ONU

La próxima junta de la agencia nuclear de Naciones Unidas, convocada para dentro de una semana, tendrá que debatir el alcance del informe reservado sobre la producción de uranio del régimen islamista. 

Ahmadineyad mantiene su plan nuclear
Ahmadineyad mantiene su plan nuclearlarazon

El Organismo Internacional de la Energia Atómica (OIEA), afirma en un informe reservado que Irán ha producido hasta ahora unos 2.800 kilos de uranio poco enriquecido –mil kilogramos más que en noviembre pasado–, cantidad que los expertos consideran suficiente para fabricar entre dos y tres bombas nucleares.

 Desde hace años, el OIEA investiga las «posibles dimensiones militares» del programa nuclear iraní sobre la base de información recibida de Estados Unidos y varios de sus aliados europeos. Según el informe, a finales de agosto había 8.856 centrifugadoras instaladas en la planta de enriquecimiento de Natanz (centro del país), de las que 3.772 unidades en funcionamiento.

Según el más reciente recuento del OIEA, Irán ha producido desde febrero de 2007 un total de 2.803 kilos de uranio poco enriquecido (con una pureza inferior al 5 por ciento), unos mil kilos más que en noviembre pasado, lo que se corresponde con el ritmo de producción alcanzado en los últimos dos años y medio. De estas reservas almacenadas por Irán, unos 310 kilos han sido utilizados para producir unos 22 kilos de uranio enriquecido hasta el 20 por ciento, con los que pretende fabricar combustible para un reactor científico en Teherán. Los expertos consideran que al enriquecer uranio hasta esos niveles, los iraníes avanzan en sus conocimientos sobre la forma de controlar el proceso para purificar uranio hasta el 90 por ciento, lo que les permitiría fabricar bombas atómicas.

Se estima que con una tonelada de uranio poco enriquecido se consigue suficiente uranio altamente enriquecido para fabricar una bomba nuclear. Por esa razón, el enriquecimiento de uranio se encuentra en el centro de la disputa sobre el programa nuclear, ya que ese material tiene aplicaciones tanto civiles como militares.