Vender la memoria por Daniel Portero

Y finalmente Pilar Manjón vendió su memoria a los sindicatos y prefirió reforzar y justificar una manifestación celebrada el día más inoportuno del año, el 11 de marzo. Cuando se habla de división entre las víctimas del terrorismo no se dice toda la verdad. Más de una decena de colectivos arropamos ayer los actos de conmemoración de los atentados en los Jardines de El Retiro (Madrid). No hay ningún tipo de división, salvo el distanciamiento de Pilar Manjón respecto a los demás, que prefirió ser utilizada por los sindicatos para hacer una poco sentida ofrenda floral a las víctimas del 11-M. Posteriormente, las organizaciones sindicales aprovecharon su gesto para lanzarse a la calle a jalear y agitar nuestro país. Esta señora debe dimitir como presidenta de la asociación Afectados 11-M, ya que, ahora más que nunca, ha quedado «afectada» y tocada una asociación que no merece que la represente una persona que es capaz de dedicar su discurso de recuerdo a las víctimas a insultar al fiscal general del Estado, cuya actuación en cualquier investigación debemos respetar. Recordemos que Manjón siempre respetó al fiscal general que nombró el Gobierno del PSOE . Hay que ser una persona muy temeraria para burlarse en tono jocoso de la Justicia. Tristemente, eso hizo ayer Manjón frente al recuerdo de tantos asesinados. Ha sido un claro insulto a la Justicia y, por ello, sus asociados deberían pedir su renuncia.