El jefe de «logística» de ETA huye a América ante el temor a ser detenido

Eneko Gogeascoechea Arronategi, miembro de la «dirección» de ETA, abandona. La cadena de detenciones de cabecillas de la banda (entre ellas la de su hermano Ibon, el pasado febrero) le ha llevado a poner tierra y mar por medio, y huir con rumbo a América, a Venezuela o México, según han informado a LA RAZÓN fuentes antiterroristas. Este tipo de viajes lo han realizado muchos miembros de ETA pero llama la atención que el que haya marchado sea un miembros del «comité ejecutivo».Eneko había huido de España a Francia en octubre de 1987, tras participar en el asesinato de un ertzaina en Bilbao, cuando preparaba, junto a los otros miembros del «comando «Katu», un atentado contra el Rey, que iba a inaugurar el Museo Guggenheim. Desde entonces, había permanecido en la clandestinidad y escalado puestos dentro del organigrama etarra, hasta llegar a ser responsable del «aparato de logística».La fecha en que se ha producido la huida no se conoce con exactitud. Eneko debía pensar que le quedaban pocos días de libertad tras conocer que su hermano había sido arrestado y que, cuatro meses después, le ocurría lo mismo a su sucesor en el «aparato militar», Mikel Karrera, «Ata».Las fuentes consultadas suponen que, dado su nivel dentro de ETA, la «fuga» a América ha podido ser pactada con los otros miembros de la «dirección». Por lo tanto, no debe ser incluido, en principio, en la lista de «desertores» que están abandonando la banda, tal y como publicó LA RAZÓN el pasado día 5.Gogeascoechea era, junto a su hermano, uno de los terroristas que había conseguido pasar más tiempo en la clandestinidad en Francia. Su rastro se había detectado en pisos y automóviles usados por ETA, pero resultaba muy difícil su localización. Tras las detenciones habidas en los últimos meses, los agentes antiterroristas no habían obtenido ningún dato que acreditara su presencia en los ámbitos de dirección de la banda. Se empezó entonces a sospechar que podía haber abandonado territorio galo o que estaba dispuesto a hacerlo, lo que se ha confirmado hace poco.Otro individuo que algunos medios han situado repetidamente en Francia, y del que no se tienen ninguna evidencia de que esté en el vecino país, es José Luis Eciolaza Galán, «Dientepunto». Se cree que nunca ha abandonado su escondite en América y que, si lo hizo temporalmente, ha vuelto a cruzar el Atlántico.La «fuga» de Gogeascoechea se enmarca, según las citadas fuentes, en el alto nivel de descomposición interna que sufre ETA y en la inseguridad que tienen sus miembros, obsesionados con que pueden ser detenidos en cualquier momento. Este temor es muy acusado entre los cabecillas, ya que el mero hecho de entrar a formar parte del «comité ejecutivo» supone que es cuestión de tiempo que se produzca la detención y el ingreso en prisión.Los responsables de la banda no encuentran, por más que se han esforzado, el fallo de seguridad que permite a las Fuerzas de Seguridad localizar y arrestar a sus jefes a los pocos meses de asumir responsabilidades dentro de la organización criminal. Esta circunstancia resta operatividad a la banda, que tiene que dedicar más tiempo a protegerse que a articular campañas de atentados.

Viajes de ida y vuelta- Eneko ya estuvo en América una temporada y regresó a Francia para ponerse al frente del «aparato de logística». Este nuevo viaje podría conllevar una estancia prolongada o, si las circunstancias lo permitieran, una vez resueltos los problemas de seguridad interna, volvería a territorio galo.- Tras la detención de Ekaitz Sirvent, uno de los responsables del «aparato político» y jefe de falsificación, en abril del año pasado, se obtuvieron indicios de que mantenía contactos con los hermanos Gogeascoechea. Al parecer, les suministraba documentos de identidad y pasaportes falsos.La detención en América de Eneko Gogeascoechea se convierte en objetivo prioritario ya que pesan sobre él varias requisitorias, entre ellas la relacionada con el asesinato del ertzaina en 1987.