Fani Raga / Secretaria general de Cáritas Valencia: «El sistema de protección social está quebrado»

-¿Es difícil dar respuesta a todas las demandas?
- Sí. No somos los Servicios Sociales, hacemos una labor complementaria. Cáritas tiene unos límites y ahora se está forzando la máquina. Se está atendiendo a muchas más familias de las que habitualmente se socorre.

-¿Cuánto tiempo lleva Cáritas «forzando la máquina»?
-Antes de que empezara la crisis. En 2007, ya se hablaba de ocho millones de personas pobres. No podemos seguir este ritmo por cuestiones de capacidad.

-¿Están cerca del límite?
-Muy cerca. Nuestros equipos están absolutamente desbordados por la cantidad de personas que atienden. Tenemos que reivindicar que las Administraciones públicas tomen conciencia de la gravedad de los problemas sociales y actúen.

-¿Falla el Estado?
-Los Servicios Sociales son lentos de gestión y no tienen recursos. Por ello, las personas vienen a Cáritas y nosotros, como Iglesia, tenemos que responder. Pero insistimos en la necesidad de reforzar todo el sistema de protección social, por una cuestión de derecho. El sistema actualmente está quebrado.

-¿Cuál es la solución?
-Reforzarlo con recursos económicos y humanos. Es una cuestión de derechos.

-La idea de que por la crisis los Gobiernos tengan que recortar en servicios sociales parece cobrar importancia.
-Si se produjeran recortes, muchas de las personas que ahora están rozando los niveles de vulnerabilidad podrían caer en la exclusión. Prevenir que estas familias caigan es mejor, y más económico, que tenerlas que empujar desde bajo.

-¿Qué ha cambiado debido a esta crisis?
-Antes se trabajaba con las personas durante un periodo y cuando se iban, ya estaban incluidas en la sociedad. Ahora, están más tiempo con nosotros y no encuentran una salida. Continúan éstas y se suman otras.

-¿Ha cambiado el perfil?
-La mayoría siguen siendo mujeres inmigrantes. Pero ha ido variando y ahora hay muchas familias españolas, que son muy vulnerables a la exclusión sin tener otro problema más que el empleo.

-¿Cobran las subvenciones de la Generalitat?
-Hemos percibido alguna de este año, pero no todas. Sabemos por experiencia que las acabaremos cobrando tarde o temprano. Estamos en conversaciones con la Administración.

-Y mientras ¿cómo sobrevive la organización?
-Con fondos propios: donaciones, colectas y socios.

-¿Ha disminuido también el número de donaciones?
-Afortunadamente, no. Aunque es cierto que es un peligro que está ahí.

-Es raro en los tiempos que corren...
-Los valencianos saben que su dinero va a ir destinado a lo que toca. El secreto es la confianza y nosotros actuamos con total transparencia.

 -¿Ven la salida de la crisis?
-Trabajamos desde la esperanza. La solución llegará, pero no de manera inmediata.

Ajustarse a la realidad
En 2012 la asociación renueva su plan. Con la sensación de haber hecho los deberes, Fani Raga explica que se han cumplido todos los proyectos reflejados en el Plan anterior. Ahora, centrarán sus esfuerzos en el apoyo a las familias afectadas por la crisis mediante dos programas: de vivienda y empleo, «para paliar las necesidades que hay ahora». Cáritas busca personas que puedan cederle una vivienda para, a su vez, cedérsela a familias que hayan sido desahuciadas.
El programa de empleo girará en torno a la formación básica y a la intermediación. «El año pasado conseguimos 1.503 inserciones laborales».