Zapatero encaja un nuevo revés: aplaza la cumbre con israelíes y palestinos

MADRID- Sin apenas tiempo para recuperarse de la descafeinada cumbre celebrada entre la UE y América Latina y Caribe esta semana en Madrid, ayer llegó el último varapalo para la Presidencia española. La reunión de la Unión por el Mediterráneo (UpM), prevista para el siete de junio en Barcelona, ya no tendrá lugar y se aplaza «sine die». Desde el Ministerio de Exteriores que dirige Miguel Ángel Moratinos se insiste en que la decisión de postergar el encuentro «ha sido consensuada» por España, Francia y Egipto (ambos copresidentes de la UpM) con el único objetivo de «garantizar el éxito» de la cumbre más adelante ya que «nadie ha cancelado su asistencia». Según las mismas fuentes, las conversaciones entre israelíes y palestinos, retomadas hace apenas diez días, «aún no están muy avanzadas» y «es mejor esperar unos meses» para sentar en la misma mesa a Israel y los países árabes. Una visión diferenteSin embargo, fuentes diplomáticas consultadas por LA RAZÓN aseguran que la causa es bien distinta y hay que buscarla «en un desencuentro entre los Gobiernos de Francia y España». Este domingo, según las mismas fuentes, se va a celebrar una reunión entre los ministros de Exteriores de Egipto, Francia y España en El Cairo para tratar de buscar una solución intermedia que podría pasar por «un encuentro en Barcelona, en la misma fecha pero con otro formato y participantes de menor nivel».Lo cierto es que en las últimas semanas parecían vencidas las reticencias de algunos Gobiernos del mundo árabe a dejarse ver en el mismo foro con el polémico ministro de Exteriores hebreo, el ultraderechista Avigdor Lieberman, quien ya había confirmado su asistencia junto al primer ministro, Benjamin Netanyahu. La última gira de Moratinos por Oriente Medio, que le llevó a Siria, Líbano y los territorios palestinos, había logrado acercar posturas y él mismo declaró a su vuelta que «hay un 90 por ciento de posibilidades de que la cumbre se realice con éxito». Pese a los buenos auspicios de Moratinos, España «no ha querido forzar» la cita sólo por hacerse la foto, y ha accedido a postergar el que iba a ser el broche de oro de la Presidencia de la UE tras el fiasco de la cumbre con Estados Unidos, también cancelada por la negativa del presidente Obama de venir a Madrid, para resolver problemas internos. La noticia de que no habrá conferencia euromediterránea en Barcelona cogió ayer por sorpresa a la Embajada de Israel en Madrid. Israel «rechaza» el argumento de que la cita, programada hace muchos meses, se cancele porque los contactos sobre el terreno no marchan como era de esperar. «Hemos hecho un esfuerzo muy grande para garantizar el éxito de la cumbre, algo que ha sido reconocido por todos los participantes», declaró su portavoz a este periódico.