Champions League

Málaga

Un paseo por La Rosaleda (0-4)

Cuando el Málaga se enteró de que había partido, perdía 0-4 en el descanso. Higuaín marcó el primer gol y Cristiano, los otros tres

Ronaldo celebra los goles metidos en el encuentro
Ronaldo celebra los goles metidos en el encuentrolarazon

En el minuto 28 hizo el tercero Cristiano Ronaldo. El Málaga no existía, abrumado por la presión del Madrid, que le apretaba muy arriba y no le dejaba pensar. Demichelis y sus zagueros necesitan tiempo para no rifarlo. Llegado el descanso, un sonrojante y merecido 0-4. Ni en La Romareda encontró Mourinho las facilidades de La Rosaleda. Higuaín marcó el primer tanto y Ronaldo, los tres siguientes. No encontraban obstáculos y ellos, secundados por sus nueve compañeros, no daban cuartel al adversario, empequeñecido, irrisorio. La caricatura albiceleste se perdió, no obstante, en el vestuario. En el segundo tiempo plantaron cara cuando ya estaba el partido perdido, se lo tomaron en serio y dispusieron de ocasiones para congraciarse con el jeque y con la afición.

Cuando en la temporada pasada el Málaga encajó aquel 7-0 en el Bernabéu, Pellegrini, que reservó a cinco titulares, no ocultó que habían tirado el partido (en marzo) y que su guerra, agobiado por el descenso, coincidía con la siguiente jornada y la visita de Osasuna. No está bien que un entrenador renuncie a la victoria sea quien fuere el contrario; pero aquella renuncia a pelear del chileno podía ser justificable. Se mantuvo en Primera; fue la lección de buena voluntad.

Ha pasado el tiempo, el Málaga ha reforzado convenientemente la plantilla, Al-Thani ha invertido cien millones y el aspecto del equipo es tan famélico que o espabila o se va al hoyo. En este encuentro le faltaban Caballero, Duda y Baptista por causas de fuerza mayor. En el césped, Cazorla, Toulalan, Apoño, Isco, Joaquín, Rondón..., buenos futbolistas, algunos consagrados y otros, prometedores. Frente al Madrid, petardos. No descendieron a esa calificación Cazorla y Joaquín, por poco y por lo poco que hicieron. El gaditano se peleó con la defensa blanca (anoche, negra) y reclamó un par de penaltis, jugadas anecdóticas en medio del vendaval que los asolaba.

El 0-4 del Madrid en el descanso tenía razón de ser. Además del acierto goleador de Higuaín y de Cristiano, destacaba la presión de estos dos jugadores, más Kaká y Di María, a los defensores malaguistas. Gámez, Demichelis, Mathijsen y Eliseu no encontraban a los centrocampistas y lo suyo era un sinvivir. A los 11 minutos Higuaín aprovechó un magnífico pase de Di María para, en dos toques, el primero para irse a la izquierda del portero y el segundo para chutar, hacer el 0-1. Reclamaba aún Joaquín un penalti, que lo fue tanto como el que le hicieron a Ronaldo. El portugués se olvidó de la jugada y no perdió la concentración; la consecuencia, tres tantos en un cuarto de hora; el 0-2 en el 23, a centro de Di María; el 0-3, en el 28, que se lo fabrica él, y el 0-4, en el 38, de acrobática espuela tras el centro de cabeza de Ramos. Tres goles seguidos, esto sí que es un «hat-trick».

De no ser por las intenciones, sólo eso, de Joaquín, que obligó a Casillas a lucirse una vez, y Cazorla, el papel del Málaga, tan blandito, se hubiese reducido al de un obediente «sparring». Las variaciones en la alineación madridista, los relevos de Higuaín por Benzema y de Di María por Özil, con Kaká en la media punta, no desmejoraron el once que barrió el martes al Olympique de Lyon.

Mourinho tiene plantilla para que en el once sólo parezcan imprescindibles Casillas, Alonso y Cristiano. El Málaga, que ya encajó un 3-0 con el Levante, no es rival. Tiene que mejorar en defensa para que refuerzos como Cazorla o Joaquín no resulten estériles.

En el descanso, Pellegrini tuvo que encararse a sus jugadores y, al contrario que la temporada pasada, les exigió. Tenían que concentrarse, dar la cara y pelear, correr, demostrar que los euros de Al-Thani están bien invertidos... Le escucharon. En el segundo tiempo se abstrajeron del 0-4 y salieron a jugar como si el marcador dibujara empate a cero. Joaquín lanzó una falta contra el travesaño; Casillas se lució ante Eliseu y a Rondón se le fue por centímetros el tanto del honor. El Madrid sufría y Mourinho recurrió a Özil y a Benzema por Kaká e Higuaín, posiblemente cansados. Además, el «Pipa», consciente de la importancia del francés, sólo mira a la portería, por eso no vio a Ronaldo, que pudo hacer el 0-5.

También estaba fatigado Cazorla y le sustituyó Seba Fernández. Al Madrid le costaba salir de su campo y Casillas tuvo que emplearse para ganarse el sueldo. Tuvo incluso suerte, porque Seba, como en la primera parte Joaquín, mandó un balón al travesaño. Mas la suerte estaba echada y al equipo de Mourinho le pesaba la «Champions». Cuando el Málaga se percató, era demasiado tarde.


Por encima del Barcelona
El triunfo del Real Madrid en Málaga fue el primer paso para que el equipo de José Mourinho superase al Barcelona en la clasificación. El empate del Sevilla en el Camp Nou (0-0) certificó el adelantamiento madridista: 19 puntos por 18.



FICHA TECNICA.

--RESULTADO: MALAGA, 0 - REAL MADRID, 4. (0-4, al descanso).
--ALINEACIONES.
MALAGA: Rubén; Jesús Gámez, Demichelis, Mathijsen, Eliseu (Monreal, min.85); Joaquín (Buonanotte, min.77), Toulalan, Apoño, Isco, Cazorla (Seba Fernández, min.70) y Rondón.
REAL MADRID: Casillas, Arbeloa, Pepe, Sergio Ramos, Marcelo; Khedira, Xabi Alonso, Di María (Callejón, min.75), Cristiano Ronaldo, Kaká (zil, min.61); e Higuaín (Benzema, min.68).
--GOLES:
0 - 1, min.11, Higuaín.
0 - 2, min.23, Cristiano Ronaldo.
0 - 3, min.28, Cristiano Ronaldo.
0 - 4, min.38, Cristiano Ronaldo.

--ARBITRO:
Mateu Lahoz (Colegio valenciano). Amonestó con tarjeta amarilla a Eliseu (min.25) del Málaga.
--ESTADIO: La Rosaleda. Lleno absoluto.