Discurso socialista contra la abstención

El fin de campaña de los socialistas se celebró ayer en un frío pabellón de los recintos feriales de Ifema con la presencia del presidente del Gobierno. Ante un aforo entregado –en el que precisamente no llamaba la atención la presencia de gente joven, sino más bien lo contrario– Tomás Gómez y el «número uno» del PSOE al Ayuntamiento de Madrid, Jaime Lissavetzky, enviaron mensajes contra la abstención justo delante de cuatro jóvenes que posaban desde un andamio.

«El voto es la palanca de cambio más poderosa», aseguró el candidato municipal, que apeló «al voto constructivo, no crítico». Mientras, Gómez –que una vez más se presentó como el candidato de la gente común y repitió que es «hijo de gente obrera» y que estudió en la educación pública–, insistió a los que el domingo no vayan a votar que «no se crean que se están absteniendo», sino que «estarán dando su apoyo a la derecha, a la derecha radical».

Por primera vez tras las primarias –y el reto de Gómez al aparato federal de su partido–, Zapatero se refirió al candidato como «un valiente al que nadie le ha regalado nada y que todo lo ha conseguido con su esfuerzo». Al margen de diferencias pasadas, los socialistas hicieron ayer piña y colocaron a Esperanza Aguirre y Alberto Ruiz-Gallardón en la diana a la que dispararon sus dardos dialécticos en unas intervenciones, las últimas hasta que hablen las urnas, en las que todos pasaron de puntillas sobre sus propuestas electorales.

«Ellos tienen un proyecto de negocio y nosotros de vida, un proyecto para la sociedad», insistió Gómez. Hasta Zapatero hizo referencia a los carteles que el PP ha hecho con el lema atribuido al candidato a la Asamblea «quiero para Madrid lo que Zapatero ha hecho en España». «Sí Esperanza –lo que queremos es– ganar dos veces al PP», contestó Zapatero, consiguiendo levantar de sus asientos a los asistentes al mitin.

La defensa de los servicios públicos, el Estado del bienestar y la protesta que toma desde el domingo la Puerta del Sol fueron los principales ejes del «número uno» a la Comunidad. Gómez se declaró «indignado con esa forma de ver la economía» y aseguró que se responsabilizará «del futuro de estos jóvenes a partir del lunes».

Han pasado quince días desde que el PSM iniciara su campaña electoral con un mitin-concierto con Jaime Urrutia en la plaza de Callao, frente a su cuartel general. Ayer en Ifema también hubo música. «El jubilado de Moratalaz», que ya dedicó sus canciones a Gómez en las primarias, cantó algo que hoy se estarán preguntando muchos: «¿Espe o Tomás?».