«El Cuco» vio el cuerpo ensangrentado de Marta

MADRID-¿Qué hubiera pasado si la Policía hubiera activado antes el protocolo de búsqueda de menores desaparecidos? Con esta pregunta arranca «Red de mentiras», un libro de los periodistas Ángel Moya y Malena Guerra editado por Temas de Hoy que resume las investigaciones del «caso Marta del Castillo» y hace algunas revelaciones hasta ahora desconocidas.Moya lamentó en conferencia de prensa la tardanza de casi 20 horas en la puesta en marcha del operativo de búsqueda, lo que sirvió para que Carcaño y a «El Cuco» pudieran deshacerse del cuerpo y limpiar el piso de Carcaño, donde presuntamente fue asesinada. Además, mostraron su sorpresa ante la rapidez y eficacia con la que actuaron los implicados el 24 de enero de 2009. «El día de la desaparición de Marta apagaron sus teléfonos de 21:30 a 23:00 horas y volvieron al lugar de sus coartadas. Después se reunieron de madrugada para deshacerse del cuerpo de Marta y volvieron a apagar los móviles de 1:30 a 03:00 horas para no ser localizados». Sin embargo, «El Cuco» se descuidó y recibió una llamada en ese periodo que lo sitúa fuera de su casa, donde se supone que estaba durmiendo.Otro de los detalles que apunta el libro es que antes de cambiar varias veces de declaración, «El Cuco» se derrumbó cuando la Policía le informó de que habían encontrado su ADN en casa de Carcaño y confesó que estaba con Miguel y que vio el cuerpo de Marta lleno de sangre.Alfredo Perdiguero, secretario de comunicación de la Unión Federal de Policía, destacó la intensa labor policial. Fruto de este trabajo fue la confesión de Rocío, de 14 años y novia de Miguel, después de haberlo encubierto durante meses. Los investigadores aprovecharon que en casa de la menor había varios ordenadores robados para llevar a su familia a los juzgados. Rocío se derrumbó y confesó que vio salir a Carcaño de la casa después de la 01:30 horas.Sobre los errores de la investigación, los autores creen que el juez y la Policía «pecaron de triunfalismo» con la primera confesión, que situaba el cuerpo de Marta en el Guadalquivir porque era «lógica y tenía sentido».

La Fiscalía de Menores solicita seis años de internamientoLa Fiscalía de Menores de Sevilla ha solicitado una condena de seis años de internamiento en un centro cerrado, seguido de tres años de libertad vigilada, para el menor conocido como «El Cuco», imputado por el asesinato de Marta del Castillo. La fiscal jefe, María José Segarra, dice que al menor se le atribuye, con carácter provisional, una «directa» participación en la desaparición de la joven sevillana, por lo que se le imputan un presunto delito de asesinato, dos de agresión sexual –uno como autor directo y otro por facilitar la agresión sexual perpetrada por Miguel Carcaño– y uno contra la integridad moral por el daño causado a los padres al no desvelar el paradero del cuerpo. La condena propuesta por el Ministerio Público es la medida de mayor gravedad prevista en la ley.