Gracias

Los sindicatos del metro nos han dado una tregua de una semana para que utilicemos el suburbano como buenamente queramos, lo que es todo un detalle. Yo la voy a aprovechar para irme de rebajas, no vaya a ser que los líderes huelguistas, esos que deberían tomar más zumo de limón en ayunas para aliviar el hígado, y cuyo sentido de la culpabilidad pasa por atribuir el malestar de los madrileños a una campaña orquestada por los medios, no lleguen a un acuerdo dialogado con la consejería de Transportes y dentro de siete días tengamos que volver a las andadas.Personalmente, les estoy muy agradecida de que hayan tenido la gentileza de darnos una semana de libertad colectiva que como todo el mundo sabe, es moneda de cambio útil cuando se trata de negociar «lo mío». Los señores de la guerra podían haber seguido saltándose la ley a la torera, y sin embargo no lo han hecho, dándonos una lección de generosidad y demostrando que cuando quieren también tienen su corazoncito; así que ya estamos tardando en darles las gracias. Síndrome de Estocolmo, creo que lo llaman...