Nueva York

Los Hombres del presidente

Obama se dispone a relevar a los pesos pesados de su Gobierno

Barack Obama y Hillary Clinton, paseando el pasado junio en Los Cabos (México), durante la cumbre del G-20
Barack Obama y Hillary Clinton, paseando el pasado junio en Los Cabos (México), durante la cumbre del G-20larazon

NUEVA YORK- La victoria de Barack Obama zanjó el martes muchas conjeturas sobre la primera legislatura del demócrata, pero también sirvió para dar comienzo al juego político de las quinielas sobre quién se va y quién se queda en la Casa Blanca para servir en el segundo mandato del presidente. La gran pregunta que se hace Washington ahora es la siguiente: ¿quién va a suceder a Hillary Clinton? La jefa de la Diplomacia ha indicado que abandonará el Departamento de Estado tras la investidura en enero.

Así empieza la carrera por la sucesión de Clinton. ¿El senador de Massachusetts y candidato demócrata de 2004 John Kerry? ¿La embajadora de EE UU ante Naciones Unidas, Susan Rice? ¿El consejero de Seguridad Nacional, Tom Donilon? Kerry, presidente del Comité de Relaciones Internacionales del Senado, es el más mencionado. Rice, envuelta en cada desafío internacional al que se enfrenta EE UU, también parte en buena posición para pelear por el puesto de Clinton. Mientras que Donilon es el más alto asistente del presidente en relaciones internacionales.

En el Pentágono, se especula también con que el secretario de Defensa, Leon Panetta, abandone su puesto a mediados de 2013. Entre los nombres para sucederle, se encuentra el de la ex jefa de Política del Pentágono, Michelle Flournoy, que se convertiría en la primera mujer al frente de Defensa, y Ashton Carter, ahora segundo de Panetta.

Incluso, también se ha mencionado el nombre del secretario de Estado de George W. Bush Colin Powell como nuevo jefe del Pentágono. Además, podría sorprender la mención del ex senador demócrata de Georgia Sam Nunn o del ex senador republicano de Nebraska y condecorado en Vietnam Chuck Hagel. También hay rumores de que el general David Peatraeus podría abandonar la jefatura de la CIA por la presidencia de la Universidad de Princeton.

No es ningún secreto que el secretario del Tesoro, Tim Geithner, quiere abandonar Washington. Es seguro que volverá a Nueva York, donde su destino será probablemente la empresa privada. Si el actual consejero de Seguridad Nacional, Tom Donilon, fuese nombrado secretario de Estado, su segundo, Denis McConough, ocuparía su puesto.
No está claro, pero es uno de los rumores de Washington que el actual director de Inteligencia Nacional, James Clapper, podría abandonar su puesto. Entonces, Obama podría confiar en el general del Cuerpo de Marines James Cartwright, que ocupa la posición más alta en el escalafón militar tras el jefe del Estado Mayor.

Finalmente, también se ha especulado sobre la salida del secretario de Justicia, Eric Holder, tras los «graves fallos» en la operación encubierta «Rápido y Furioso», que permitió el contrabando de unas 2.000 armas a México en 2009. Algunos medios apuntan a la secretaria de Seguridad Nacional, Janet Napolitano, y al gobernador de Massachusetts, Deval Patrick, como los posibles sucesores de Holder.

¿Qué pasará con Hillary Clinton?; por Pedro G. Poyatos
Ni secretaria de Estado ni candidata demócrata a la Casa Blanca en las lejanas presidenciales de 2016. Una vez conseguida la reelección de Barack Obama, Hillary Clinton, 65 años, reitera su intención de abandonar el Gobierno y «dejar la política» tras veinte años en la vida publica. «No creo que los proyectos de la secretaria [de Estado] hayan cambiado. Ustedes la han oído muchas veces expresar su intención de negociar su transición de poder y luego regresar a la vida civil para descansar, aprovechar la oportunidad para pensar y escribir», aseguró ayer a la Prensa la portavoz del Departamento de Estado, Victoria Nuland. Tras cuatro agotadores años en los que ha visitado 110 países como jefa de la Diplomacia de EE UU, Clinton ha insistido en que «ha sido un honor y una experiencia personal extraordinaria, pero de verdad quiero tener tiempo para mí misma. Me alegro ya de ello».
Obligada a renunciar a sus ambiciones presidenciales tras unas reñidas primarias contra Obama, son muchos, especialmente desde las filas republicanas, que especulan con que Hillary aún aspira a competir por la Casa Blanca en 2016. Según el ex candidato John McCain, esto explicaría el protagonismo jugado por su marido, Bill Clinton, en la reciente campaña. Y es que «Billary» –como son apodados en la Prensa– son conscientes de que el hecho de que Obama ocupe la Casa Blanca estos cuatro años es la mejor plataforma para que otro demócrata vuelva a ganar en 2016. Con todo, Hillary rechazó los rumores en una reciente entrevista a la revista «Marie Claire» en la que, sin embargo, expresó su deseo de conocer a la primera presidenta de EE UU.