La obsesión de la izquierda

Los izquierda tiene una curiosa obsesión por la ultraderecha. Es una fiebre que afecta a medios de comunicación, periodistas y políticos por igual. La encuentran en los sitios más variopintos y las circunstancias más inverosímiles. Todo es ultraderecha. Con el tiempo he llegado a la convicción de que les molesta que no exista en España con la relevancia que tiene en otros países. Es una fórmula que utilizan para atacar tanto al PP como a todo aquello que les molesta. Las protestas contra Zapatero durante el desfile de las Fuerzas Armadas fue obra de la ultraderecha. Por supuesto. El movimiento patriótico en EEUU, conocido como el «Tea Party», está compuesto por peligrosos ultraderechistas. Es asombroso que todos los estadounidenses no estén alienados con ese icono del progresismo que es Obama. Muchos de esos dogmáticos que arremeten contra sus rivales con el argumento de la ultraderecha son los mismos que abrazaban fervorosamente hace unos años las ideas de la ultraizquierda totalitaria.