Ayuntamiento y Consell pagarán de 12 a 18 millones por las regatas pagarán entre ACM firman el acuerdo para las regatas de julio

VALENCIA- America's Cup Management (ACM), empresa organizadora de la Copa América, ha logrado mantener buena parte de sus exigencias en el contrato que permitirá a Valencia acoger las regatas. Así, tras la firma del contrato con el Ayuntamiento de Valencia y la Generalitat, los suizos obtendrán entre doce y dieciocho millones, algunos menos de los que exigía hace apenas unos días. El resto de detalles del pacto, los hará públicos hoy la alcaldesa Rita Barberá. Con la firma de este contrato, los gobiernos local y autonómico asumen la participación del Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero que se negó a pagar su parte del canon impuesto por ACM -siete de los veinte millones- al considerar la cifra «exorbitante», más aún cuando no hay una sentencia en firme en el caso que enfrenta al defensor del título, Alinghi, con el BMW Oracle. No obstante, la amplitud de la horquilla del canon podría responder a una posterior participación del Gobierno, que dejaría en tres partes iguales de seis millones de euros la inversión en la competición.Mientras, el fallo mantiene en vilo no sólo a las administraciones implicadas, sino también a los 18 equipos inscritos en la próxima edición. No obstante, éstos siguen con una agenda que incluye la celebración de dos pruebas en aguas valencianas: la primera, el próximo mes de julio y otra a finales de octubre. Si el Tribunal de Nueva York falla a favor de los helvéticos, se considerarán puntuables para la 33ª Copa América, pero si le da la razón a los norteamericanos, se tratará de meras regatas. Con todo, en el encuentro de equipos de ayer no todo fue armonía. A la espera de la sentencia, que podría conocerse mañana, los equipos andan preocupados por asuntos logísticos. En este sentido, Pedro Perelló, director general del Ayre, uno de los dos equipos españoles que compiten, calificó de «error» que ACM admitiera a más equipos que bases hay en la dársena porque, a su juicio genera «una competición interna» entre ellos. En este punto, recordó que el Ayre fue el séptimo, por lo que confía en tener unas buenas instalaciones.Sin embargo, Brad Butterworth, patrón y vicepresidente del Alinghi, aseguró que la falta de bases «no es un gran problema» y apuntó que es posible que algunos equipos tengan que compartirla.