Galicia
Cómo sobrevivir en un internado
En San Severo, 20 chicos de hoy se encontrarán con profesores como los de antaño, caracterizados por su disciplina. ¿Quién abandonará antes?
Tendrán que deshacerse de «piercings» y maquillajes, abandonar sus móviles y ordenadores, adecentarse el pelo –los chicos deberán llevarlo corto y las chicas recogido– para meterse en el papel de un alumno de los años 60 y formar parte del alumnado de «Curso del 63», el nuevo «docu reality» que Antena 3 estrena en septiembre. El primer cambio lo experimentarán en su indumentaria, que irá desde la ropa interior de la época hasta el austero uniforme de San Severo, el nombre de este internado ficticio localizado en algún lugar de Castilla y levantado en 1913. Además, también tendrán que acostumbrarse a usar plumas estilográficas, escuadras y cartabones de madera o discos de microsurco en lugar de sus mp3. Eso sólo será el comienzo, porque, aunque no habrá castigos físicos, las cosas en San Severo –el nombre ya lo dice todo– no van a ser fáciles. «El proceso de adaptación es difícil y alguno se ha quedado por el camino. El paso que se dio en los 80 de llamar de usted a los profesores a tutearlos ya ha quedado muy lejano, igual que el profesor como autoridad. Los alumnos de hoy no están acostumbrados», explicó a este periódico Ignacio Alguero, escritor que se ha encargado del asesoramiento histórico. ¿Dónde está el río Júcar?La función de Elguero será «recrear desde un punto de vista educativo y sociológico el ambiente de un internado de los años 60 y mostrar la disciplina y la austeridad de aquellos años, aunque se ha obviado cualquier relación a lo religioso y lo político para centrarse en el sistema educativo». A pesar de que no se pretenden comparar los sistemas de antaño con los actuales, lo cierto es que las repuestas de nivel de los alumnos darán mucho de qué hablar, ya que hay quien ha situado el río Júcar en Galicia, Lérida en la provincia de Málaga, o quien confunde el Ebro con el Guadalquivir, eso sin contar las faltas de ortografía.Elguero, precisamente, ha sido el encargado de recuperar los libros de los primeros 60: «Antes se daba más la cultura del tocho y del libraco y, por supuesto, sin estampas como se decía antes». Unas piezas de colección que los alumnos-concursantes ven como objetos arqueológicos.En cuanto a los profesores, para que puedan representar ese papel de profesor serio que imparte autoridad se ha elegido a docentes aficionados a la interpretación. Entre el claustro de profesores destacan doña Alicia Flon como profesora de Matemáticas, Geografía, Historia y prefecta de las chicas; don Luis do Pazo como profesor de Física y Química y prefecto de los chicos; o doña Julia Gallardo, como docente de Lengua, Literatura y Hogar Con todos estos ingredientes, el debate está servido, como asegura el asesor histórico del espacio que confía en que «puede fomentar las relaciones entre padres e hijos».
San Severo, un instituto levantado en 1913El centro escolar donde se desarrolla «Curso del 63» es el instituto –ficticio– San Severo, supuestamente fundado por el filántropo don Saturnino Espinel de Bracamonte y Díaz de Lucena. San Severo funciona en régimen de internado. Cada uno de los dormitorios, uno para los chicos y otro para las chicas, consta de diez camas de hierro originales de la época.
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