Griñán cree que los resultados de las europeas zanjan el «caso Chaves»

Primera sesión de control al Gobierno tras las elecciones europeas y el presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, y el presidente del PP-A, Javier Arenas, se enzarzaron en una discusión a cuenta de los resultados electorales. El PSOE tenía cierto temor por la tendencia a la baja del partido en toda España, la marcha de Chaves a Madrid agudizada por la subvención a la empresa apoderada por su hija y la primera cita electoral de Griñán como presidente. Y los ocho puntos de diferencia le han supuesto cierto alivio. «Con los resultados del domingo, nosotros tendríamos ahora 57 diputados» por los 56 del PSOE-A en la actualidad en la Cámara andaluza, le llegó a decir Griñán a Arenas durante el debate de ayer.
Hasta cuando Arenas le habló de Aguas Teñidas, Griñán le sacó a colación los resultados de los comicios europeos. «No es justo que exista un trato diferente a una empresa –le dijo el presidente del PP-A– en función de sus apoderados». La respuesta del presidente del Gobierno andaluz, en clave de elecciones: «Está utilizando recursos que no son los mejores para la contienda electoral y el pueblo le dice una y otra vez que se está equivocando».
Pero además de las puyas dialécticas, tanto Arenas como Griñán tiraron de datos, los únicos que nunca se quejan. «El PP-A ha subido 140.000 votos y el PSOE-A ha bajado en 100.000» le argumentó el dirigente popular. El contraataque de Griñán fue en porcentajes, asegurando que mientras que el apoyo del PP-A a su partido a nivel nacional había sido del 15,7 por ciento, en las últimas generales fue del 17 por ciento.
A esas alturas, lo de menos era que ninguno de los dos se presentó a las elecciones europeas y que el primer gran test será en las municipales de 2011 y ,sobre todo, un año después, cuando ambos se enfrenten previsiblemente en las elecciones autonómicas.
Al margen de elecciones, Arenas le reprochó al Gobierno andaluz el escaso desarrollo del Estatuto de Autonomía de Andalucía, más de dos años después de su aprobación. «Lo han tirado a la basura y han incumplido su espíritu y su letra» le recriminó el presidente de los populares andaluces. Griñán lo negó y aseguró que en 812 días se han aprobado 39 leyes, «más de una por mes». Claro que en este saco, el presidente del Ejecutivo andaluz incluyó varias leyes que se estaban negociando o se habían prometido antes de la aprobación del texto estatutario. Con todo ello, Arenas le recordó el incumplimiento de su predecesor en el cargo, el ex presidente Chaves, que prometió una comisión para abordar el desarrollo estatutario, «que todavía no se ha reunido».
Pero donde el líder popular puso el acento fue en el cobro de la Disposición Adicional Segunda del Estatuto, la deuda histórica, que el Gobierno pretende pagar «en solares». Y Arenas avisó: «Si lo aceptan será una ignominia y se va a organizar la mundial». En la sesión de la tarde, el PSOE rechazó una proposición no de ley de los populares, que fue apoyada por IULV-CA, en la que se demandaba que la Cámara expresara su rechazo a cualquier pago que no fuera en metálico.
 Y de la denuncia de incumplimientos actuales, a vulneraciones futuras. «Han aceptado que Andalucía no sea la que más cobre en el nuevo sistema de financiación», le dijo Arenas a Griñán, que se limitó a decir que la región nunca fue la que más cobró en años anteriores.
Tampoco quiso mojarse el presidente de la Junta sobre la ayuda a Aguas Teñidas. «Si no tiene nada que ocultar, acepte una comisión de investigación», le pidió Arenas. Griñán prefirió no contestar, no sin antes ceñirse al argumentario oficial: no hubo trato de favor ni se cambio ninguna norma para beneficiar a Matsau.

LAS FRASES
José Antonio Griñán: «Quien explica una derrota como un éxito es que tiene problemas. Usted, Arenas, va de derrota en derrota hasta la catástrofe final. No se cansa de perder»
Javier Arenas: «Consejos de usted, ninguno. La primera vez que se ha presentado le hemos acortado once puntos. Pleno empleo, calidad educativa y convergencia son sus tres grandes fracasos»