Miami

La novia de Julián Lago negocia varias apariciones en televisión

Lago dejó nuestro país y se instaló en Paraguay para quitarse de en medio
Lago dejó nuestro país y se instaló en Paraguay para quitarse de en mediolarazon

L a sombra de la duda y el recelo se cierne ya sobre esta mujer paraguaya que acompaña la agonía de Julián Lago. El creador de «La máquina de la verdad» podría aplicársela, en el caso de que se recupere, a quienes parecen mantener un mano a mano con él. Y, aunque Natalia Escalada fue su esposa durante 23 años y viajó para acompañar a su hijo Pablo, de 19, ya la mezclan y relacionan con la joven con la que el periodista se marchó a Paraguay el pasado mes de diciembre. Mantenían una relación desde hacía no mucho y marcharse le pareció a Lago la mejor manera de quitarse de enmedio. Nunca hubiese imaginado que un estúpido accidente cortaría de tajo sus aspiraciones de recuperar el tiempo y la fama perdidos. Porque, después de haber dirigido «Tribuna», se fue a Valencia para ampararse en Canal 9. Luego dirigió «El Diario de Valladolid» al mismo tiempo que rompía su ya imposible unión con Natalia Escalada. Posible trasladoJulián fue pródigo y generoso con ella. Puso a su disposición casi todo el patrimonio que ganaron juntos: «Para ti la casa de Marbella, que es lo que te gusta, y yo me quedo con la de Ibiza», argumentó entonces muy desprendido.Natalia Escalada pasó diez días con su hijo Pablo cuidándole y velándole, aunque se les habían anticipado los dos mayores, nacidos de su primer matrimonio. Ahora les atribuyen la determinación de «desenchufarle» para no prolongarle la vida. Ante la oposición del hijo pequeño, Pablo, amparado por su madre, aplazaron la decisión. Y Julián sigue vivo, a Dios gracias, con la posibilidad de que lo trasladen a España para ver qué solución encuentran. Como uno de los aviones ofrecido por El Pocero se estropeó –no era el que fue habilitado para trasladar a Rocío Jurado de Miami a Madrid–, la operación se interrumpió. No han vuelto a saber del constructor, ni de su relaciones públicas, Alfredo Urdaci. Están como desaparecidos en combate, a lo mejor es por el fiasco. Manuel Iglesias, otro industrial español que reside en Brasil, ha ofrecido también el suyo y están a la expectativa.Se sabe ya que Yolanda, la novia paraguaya, había contactado con alguna tele para, aprovechando el viaje, hacer algo de caja. Ella se queja de los gastos, aunque tira y paga con el dinero que Lago tiene en una cuenta corriente. Solicitó la tutoría sobre Julián y sus bienes y una jueza, sin consultar a ninguno de sus tres hijos, como sería lo lógico, se la ha otorgado. Yolanda habla de facturas habituales de entre 1.300 y 3.000 euros al día, un dato que parece exagerar la realidad. Pablo ha solicitado las facturas médicas, que no suben de los 860 por jornada y atención. Aun así, siempre estarían subsanadas con fondos del periodista, que agoniza en tierras lejanas que un día le parecieron de promisión. El destino, a veces, juega estas malas pasadas. Qué lástima.