Uno de cada cuatro niños adoptados en el extranjero llega con algún problema de salud

Entre el 20 y el 25 por ciento de los niños extranjeros adoptados en España presenta algún problema de salud, si bien es cierto que la mayoría son "banales", se soluciona en Atención Primaria y sólo un 5 por ciento necesita pruebas complementarias en el hospital.
Esos trastornos de salud van desde a retrasos en el crecimiento y problemas psicomotrices, problemas dermatológicos o infestaciones de parásitos. Todos se recuperan en el plazo de seis meses y un año, según explicó el doctor Juan Ruiz-Canela, presidnete de la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria, en conferencia de prensa en la Organización Médica Colegial. "La mayoría de los niños tiene fortaleza para superar esas condiciones".
Unos y otros problemas de salud están muy relacionados la situación por la que han pasado. "Cada año de orfanato supone entre tres y seis meses de retraso", indicó Jesús García Pérez, jefe de la unidad de Pediatría Social del Hospital Niño Jesús y miembro de la Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria. Así, los pediatras recomiendan que su ingreso en una guardería o colegio no sea inmediato a su llegada a España, ya que los pequeños necesitan tiempo para crear un nuevo vínculo afectivo y de hecho pueden confundir esos centros infantiles o educativos con un nuevo orfanato. En muchas ocasiones son incontinentes, lo que también supone problemas en el colegio. "Es una manera de cagarse en su padre o su madre porque les llevan a sitios donde no quieren estar", dijo el doctor García Pérez.
También influye el lugar de procedencia. Así, es muy frecuente que los niños chinos presenten intolerancia a la leche de vaca, rechazada tradicionalmente en su país de origen. Los que llegan de Africa presentan problemas de parásitos, pero los pediatras desmintieron que el paludismo esté extendido entre ellos. Si proceden de lugares como La India o Paquistán, los problemas normalmente pasan por poca talla y retraso psicomotriz, motivado por la falta de apego y el abandono. "Son niños tristes", precisó el pediatra del Niño Jesús.
Luego está el caso de los niños que proceden de la Europa del Este y que, en edades más mayores, presentan más problemas de adaptación.
La Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria recomienda que los padres que van a adoptar hagan una visita previa al pediatra y, una vez que el niño esté en España, esperen una dos o tres semanas para llevarle al médico y poder hacer una evaluación psicológica de su desarrollo, junto a la exploración física.

MENOS ADOPCIONES, MAS SOLICITUDES

En 2007 se adoptaron 3.648 niños de países extranjeros -frente al millar de adopciones nacionales-, y la cifra asciente a 37.565 entre 1997 y 2007. Las cifras sitúan a España en la segunda posición en adopciones internacionales en términos absolutos, sólo por detrás de Estados Unidos, y en el primer puesto en términos absolutos.
Mientras que las adopciones se han reducido un 18 por ciento entre 2004 y 2007 por diferentes razones -mayores trabas burocráticas y paralizaciones en los países de origen fundamentalmente-, "no ha mermado el interés creciente de las familias españolas que desean adoptar", explicó Amparo Marzal, directora general de las Familias y la Infancia del Ministerio de Educación, Política Social y Deportes.
Así, el número de solicitudes de familias españolas es creciente y pasó de 9.878 en 2005 a 11.843 en 2006, según los últimos datos disponibles. El 15 por ciento de esas peticiones son presentadas por familias monoparentales.
Los principales países de procedencia de los menores son China y la Federación Rusa de manera destacada, seguidos a más distancia por Etiopía, Ucracia y Colombia.
El 69 por ciento de ellos tiene entre 0 y 3 años, aunque la cifra de bebés ha ido decreciendo en los últimos años, según Marzal.
La Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria y la Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria presentaron este miércoles la Guía de Salud en Adopción CORA 2008, un instrumento que pretende ser de ayuda a estos profesionales para una mejor atención al niño adoptado en el extranjero. CORA es una federación de 25 asociaciones que agrupan a 15.000 familias adoptantes.