Pontevedra

Maltratadores y reincidentes

Uno de cada tres hombres que mataron a sus mujeres en 2008 tenía antecedentes penales. El 80% de las víctimas no había denunciado a su agresor, aunque el número de demandas creció un 15,9% el año pasado

Maltratadores y reincidentes
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madrid- El control de los maltratadores y la falta de denuncias previas son los principales problemas con los que se encuentra la Ley Integral sobre Violencia de Género. En sus tres años de vigencia, el número de muertes no se ha reducido (el Gobierno habla de un descenso del cinco por ciento, que se puede tornar en incremento si se confirman los siete casos que están en investigación) y, lo que es más grave, sólo el 20 por ciento de las 70 víctimas mortales de 2008 habían denunciado su situación. Esto se traduce en que el 80 por ciento de las mujeres asesinadas a manos de sus parejas no habían dado un paso al frente para afrontar un problema que, a la postre, les costó la vida.
Esta situación está cambiando, aunque muy lentamente. Según explicó ayer el delegado del Gobierno para la Violencia de Género, Miguel Lorente, el pasado año se presentaron 405 denuncias diarias de maltrato, lo que supone un incremento del 15,9 por ciento respecto a las 407 denuncias diarias de 2007.
En cambio, el control de los maltratadores sigue siendo una de las asignaturas pendientes. A finales de año, la sociedad se conmovió al conocer que en Pontevedra un hombre controlado por una pulsera antimaltratadores había violado una orden de alejamiento, asesinado a su ex pareja y que había fracasado en el intento de homicidio de su ex mujer. Éste es sólo un ejemplo, porque el 31,4 por ciento de los asesinatos por violencia de género fueron cometidos por hombres con antecedentes penales, la mayoría de ellos relacionados con malos tratos sobre la víctima (21,4 por ciento) o sobre otra mujer (7,1).
Según Lorente, en 2008 se ha observado un cambio de tendencia importante. Los asesinatos machistas se producen cada vez más en casos de separaciones y se reducen los que se producen en el ámbito familiar. Y lanzó un mensaje muy claro a las mujeres sometidas al yugo de sus parejas: «Hoy por hoy es más seguro denunciar que no hacerlo».
Otro de los cambios es el que afecta a la nacionalidad de las fallecidas. En los últimos años se ha producido un descenso en los homicidios de mujeres españolas, que han pasado de representar el 70,6 por ciento del total en 2006 al 55,7 por ciento de 2008. Un descenso inversamente proporcional al de las extranjeras, que han pasado del 29,4 por ciento de hace tres años a casi la mitad el pasado año (44,3).
Concienciación
Lorente recalcó la importancia de denunciar la situación de violencia machista y destacó que la sociedad está cada día más concienciada contra esta lacra social. Las víctimas siguen siendo mayoritariamente las que acuden a la Justicia a hacer pública su situación (75 por ciento), pero el peso de familiares, sanitarios y autoridades es cada vez más importante.
En el caso de las denuncias presentadas por familiares se ha producido un incremento del 116,7 por ciento respecto a 2007. Un crecimiento menor, pero importante, es el experimentado por los atestados por intervención directa (40,5 por ciento) y los partes de lesiones (35,4 por ciento).
El secretario de Estado informó de la relación causa-efecto que puede generar la información sobre un homicidio, lo que «puede precipitar una decisión premeditada». Así, el 22,8 por ciento de los casos se produjo un día después de un asesinato, cifra que cae al 7,1 por ciento a los dos días después y al 5,7 tres días después.
Llamadas al 016
El teléfono gratuito de información y asesoramiento ha recibido 90.666 llamadas desde su puesta en marcha en septiembre de 2007. El perfil de las personas que han utilizado este servicio gratuito es el de una mujer casada (68,7 por ciento), con hijos (90,6 por ciento), con estudios universitarios medios (65,2), nacida en España (75,2) y que trabaja fuera de casa (51,6).
Los días que más consultas se realizaron fueron lunes, martes y miércoles. Los horarios están directamente relacionados con los laborales. De este modo, la hora «punta» se sitúa a las 12:00 horas y se mantiene estable hasta las 20:00 horas.