«Paparazzi»: acoso y derribo

En enero de 2007, las constantes persecuciones a las que se veía sometida Kate llegaron a un punto de no retorno. La joven incluso grabó a los «paparazzi» para tener pruebas del acoso. Poco después, en abril, se anunciaba la ruptura de manera «oficiosa». Kate Middleton no pudo más y decidió refugiarse una temporada en casa de sus padres. Poco a poco, la pareja volvió a verse, hasta que se reanudó la relación. En marzo de 2008, la Casa Real británica contrataba un guardaespaldas para Middleton y saltaban las primeras alarmas: boda en Navidad. Un año después, vuelve el rumor. Que, dicen, esta vez va en serio.