Yihadismo

Asesinato en directo de cinco cristianos en Nigeria

El nuevo crimen coincide con la prohibición del Estado Islámico a los musulmanes para que participen en las fiestas navideñas

El Estado Islámico distribuyó anoche un vídeo en el que se recoge, en plenas Navidades, el asesinato por la espalda y con armas automáticas de cinco cristianos en la región de Brno, al noreste de Nigeria. Los yihadistas repiten su siniestro ritual de colocar a sus víctimas arrodilladas y situarse detrás. Tras una proclama, los ametrallan hasta darles muerte.

La vinculación de este nuevo crimen con las festividades navideñas queda clara si se tiene en cuenta que la misma banda terrorista ha difundido en su redes sociales un mensaje en el que recomienda a los musulmanes que, bajo ningún concepto, participen en dichas fiestas ni en ninguna similar.

Las fiestas de los infieles son muy diferentes, y el musulmán no tiene por qué buscarlas y conocerlas, sino que le basta con saber (...) que no tienen base en la religión del Islam” y son por lo tanto una herejía. Tampoco pueden aceptar regalos que son habituales en esta época, como velas o huevos de Pascua.

El fanatismo de los yihadistas no tiene límites. La pasada Navidad, agentes del Cuerpo Nacional de Policía interceptaron a un individuo marroquí, que con una especie de cimitarra caminaba por una céntrica calle de Castellón de la Plana y se dirigía a los ciudadanos al grito de “Ala es grande” (que suele preceder a su asesinato), al tiempo que amenazó de muerte a dichos agentes.

De no haberse producido esta brillante actuación, las consecuencias podrían haber sido fatales y lo que hasta ahora es una alerta antiterrorista reforzada se podría haber convertido en una tragedia. El marroquí, que ha ingresado en prisión, tiene un primo que combatió con Daesh en Siria y que cumple condena en una cárcel marroquí.

Tanto lo ocurrido en Nigeria como lo que pudo suceder en España demuestra el odio que sienten los yihadistas por la religión cristiana y su objetivo de erradicarla de cuantos lugares puedan. Son incapaces de una convivencia pacífica y se rigen por el principio de que el Islam es la única creencia verdadera.