En busca y captura

Cinco millones por la cabeza de “Los Chapitos”: la recompensa que ofrece EEUU los hijos del “Chapo”

Los herederos del líder del cártel de Sinaloa, conocidos también como “Los Menores”, están inmersos en una guerra interna por el control de la organización

Ovidio Guzmán López, Iván Archivaldo Guzmán Salazar, Jesús Alfredo Guzmán Salazar y Joaquín Guzmán López se encuentran en busca y captura
Ovidio Guzmán López, Iván Archivaldo Guzmán Salazar, Jesús Alfredo Guzmán Salazar y Joaquín Guzmán López se encuentran en busca y capturalarazon

El Departamento de Estado de EE UU anunció este miércoles recompensas de hasta cinco millones de dólares por cualquier información que conduzca a la detención de los hijos de Joaquín el “Chapo” Guzmán.

Washington informó en un comunicado que como parte de su esfuerzo por combatir el narcotráfico, el presidente Joe Biden firmó dos nuevas órdenes ejecutivas: una para declarar la emergencia nacional para lidiar con la “epidemia de drogas” que vive Estados Unidos y la segunda para establecer el Consejo estadounidense sobre Crimen Organizado Transnacional (USCTOC).

Como parte de dicho esfuerzo, la Administración Biden informó sobre recompensas bajo el Programa de Recompensas sobre Narcóticos (NRP) y el Programa de Recompensas sobre Crimen Organizado Transnacional (TOCRP), entre las que se encuentra el ofrecimiento de hasta 5 millones de dólares (por persona) por información que conduzca al arresto y/o procesamiento de Ovidio Guzmán López, Iván Archivaldo Guzmán Salazar, Jesús Alfredo Guzmán Salazar y Joaquín Guzmán López, todos ellos hijos del “Chapo”, quien cumple una sentencia de cadena perpetua en una prisión de máxima seguridad en Colorado.

El Departamento de Estado describió a los cuatro hijos como “miembros de alto rango del Cártel de Sinaloa y sujetos a acusación federal por su participación en el tráfico ilícito de drogas”. Sin embargo, el nombre de “Los Chapitos”, o “Los Menores” como les dice su padre, ya habían estado otras veces en el foco de atención.

Uno de sus hijos, Édgar Guzmán, de 22 años, fue asesinado el 8 de mayo de 2008 en un centro comercial de Culiacán. Ese hecho provocó desavenencias entre el “Chapo” y sus primos, los Beltrán Leyva, pues el líder del cártel de Sinaloa creyó que sus parientes habían asesinado a su hijo, aunque en realidad fue uno de sus lugartenientes, quien lo confundió con un rival.