Represión en Venezuela

Capriles: «Tomaremos Venezuela»

El líder opositor amenaza al Gobierno si el Supremo suspende el referéndum revocatorio. La MUD y el oficialismo vuelven a medir sus fuerzas en distintas manifestaciones en todo el país.

Henrique Capriles participó en los actos organizados por la oposición a favor del revocatorio contra Nicolás Maduro, ayer en Caracas
Henrique Capriles participó en los actos organizados por la oposición a favor del revocatorio contra Nicolás Maduro, ayer en Caracaslarazon

El líder opositor amenaza al Gobierno si el Supremo suspende el referéndum revocatorio. La MUD y el oficialismo vuelven a medir sus fuerzas en distintas manifestaciones en todo el país.

De nuevo las calles de Caracas fueron escenario ayer de grandes manifestaciones de ambos bandos. Y todo en la víspera de que Supremo dictamine si anula o no el referéndum revocatorio contra Nicolás Maduro. Con ocasión del Día de la Resistencia Indígena –día de la Hispanidad–, los chavistas se movilizaron para mostrar su apoyo al Gobierno. El vicepresidente venezolano, Aristóbulo Istúriz, destacó que la marcha es una alerta al imperialismo de que el pueblo está dispuesto a defender su patria. Por su parte, el vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Diosdado Cabello, aseguró a la oposición que el chavismo estará en las calles «hasta el último respiro» porque «Maduro no abandonará su cargo pese a los planes de los opositores». Cabello agregó que la oposición amenaza con violencia para presionar y conseguir que se celebre el revocatorio porque «los muertos no les importan, no les importa absolutamente ningún acto de violencia, porque su única ambición es el poder».

Dirigiéndose al ex candidato presidencial Henrique Capriles y al presidente del Parlamento venezolano, Henry Ramos Allup, Cabello añadió: «Si ustedes creen que nosotros vamos a abandonar esta batalla estás pelando, oíste».

La actividad de los oficialistas coincidió con la protesta de la alianza opositora, anunciada hacía semanas, que exigió la renuncia de Maduro y nuevas elecciones. Durante la jornada también se recogieron datos de los venezolanos que quieren participar como voluntarios para las jornadas de recogida de firmas para el referéndum. Fue una especie de simulacro de cara al «día D».

Acompañado por la mayor parte de los dirigentes de la coalición Mesa de la Unidad Democrática (MUD), Capriles sostuvo que el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) podría emitir una sentencia que impida continuar con el proceso para convocar a un revocatorio, que la oposición exige se realice en 2016. El gobernador del Estado Miranda afirmó que los magistrados del TSJ publicarán esta resolución entre hoy y el viernes. «Nosotros hemos sido una contención. Le hemos dicho a la gente: ‘espere, espere, tenemos que ir por el camino constitucional’. ¿Pero qué pasará si matan el revocatorio?», añadió, al referirse a la crisis económica y social que atraviesa el país debido a la alta inflación, la escasez y la inseguridad personal. «Tenemos que estar en alerta máxima. Si ellos pretenden quitarnos nuestro derecho por medio de una medida cautelar, nosotros inmediatamente tendríamos que hacer la ‘toma de Venezuela’», agregó. En los últimos meses, sectores del oficialismo han presentado varias demandas judiciales contra la convocatoria del referéndum. «No puede ser que en el país se profundice la crisis sólo porque una persona no quiere someterse al escrutinio. Hay gente dentro de la Fuerza Armada completamente en contra de que se genere una decisión de ese tipo. Lo advertimos porque tampoco queremos un golpe de Estado», sentenció el líder opositor.

La MUD debe, los próximos 26, 27 y 28 de octubre, recoger unos cuatro millones de firmas (20% del padrón electoral) para que se convoque el referendo revocatorio. Pese a que el Consejo Nacional Electoral ya declaró que el revocatorio sólo podría realizarse a partir de febrero, la MUD insiste en que se haga este año porque si Maduro pierde habrá que llamar a elecciones anticipadas. Si la consulta se aplaza a 2017 y Maduro es revocado, su vicepresidente debe completar su mandato hasta 2019.

Mientras, Ramos Allup aseguró que el Supremo prepara una sentencia que contempla su destitución como diputado y posterior apresamiento. El presidente del Parlamento dijo que tiene la información de que la Sala Constitucional tiene preparada una decisión en la que lo usarán «como ejemplo» ante el resto de los diputados opositores para allanar su inmunidad parlamentaria y apresarlo. «Yo le quiero enviar un recado a las hamponas de la Sala Constitucional y a los hampones de la Sala Constitucional: si a mi me citan para concurrir a ese pudridero, a esa cloaca, yo no voy a ir», dijo.