Guerra mundial

El desconocido país que podría decidir el rumbo de una guerra mundial: sus tierras esconden un tesoro estratégico

Podría albergar uno de los mayores yacimientos de los minerales más codiciados del mundo

Astaná, Kazajistán
Astaná, Kazajistán Pexels

La guerra en Ucrania no solo ha reconfigurado el equilibrio geopolítico en Europa, sino que también ha desatado una carrera global por el control de recursos estratégicos. En este nuevo contexto, las tierras raras se han consolidado como uno de los activos más codiciados del planeta. Estos 17 elementos químicos, esenciales para la fabricación de tecnología militar avanzada, energías renovables y dispositivos electrónicos de última generación, se han convertido en una prioridad absoluta para potencias como Estados Unidos y China, que compiten por dominar su extracción, procesamiento y comercialización.

De hecho, la creciente dependencia mundial de estos minerales ha llevado a numerosos países a examinar sus propios territorios en busca de yacimientos viables, al tiempo que grandes corporaciones y gobiernos redoblan sus inversiones. En este contexto, un país que tradicionalmente ha sido pasado por alto a nivel internacional ha comenzado a generar interés. Se trata de Kazajistán.

Un millón de toneladas de tierras raras

Con amplias extensiones de territorio, una posición geográfica clave entre Europa y Asia, y una larga tradición minera, Kazajistán podría albergar el tercer mayor yacimiento de tierras raras del mundo. Este hallazgo no solo podría transformar la economía del país centroasiático, sino que lo posicionaría como un actor crucial en una eventual guerra global marcada por la competencia tecnológica y energética.

Fue hace apenas unas semanas cuando las autoridades kazajas anunciaron el descubrimiento de un gran yacimiento en la región de Karagandá, en el centro del país. Aunque expertos internacionales han pedido cautela antes de confirmar su envergadura real, medios locales aseguran que se habrían identificado aproximadamente un millón de toneladas de tierras raras distribuidas en cuatro zonas prospectivas. Entre los elementos detectados figuran algunos de los más valiosos para la industria tecnológica, como el cerio, el lantano, el neodimio o el itrio, tal como recoge la cadena alemana DW.

Paralelamente, el gobierno kazajo no ha tardado en calificar el hallazgo como "el mayor depósito de tierras raras" del país. Desde el Ministerio de Industria se ha detallado que la cantidad potencial de recursos en el área, bautizada simbólicamente como "Nuevo Kazajistán", podría alcanzar los 20 millones de toneladas a una profundidad de hasta 300 metros. Sin embargo, esta estimación aún debe ser verificada de forma independiente. Además, para su explotación a gran escala, Kazajistán necesitaría el apoyo de socios extranjeros, ya que actualmente carece de la tecnología e infraestructura necesarias para procesar estos materiales de forma autónoma.