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Elecciones Ecuador

Ecuador votó su segunda vuelta presidencial bajo estado de excepción

Cerca de 13 millones de ciudadanos estaban llamados a las urnas

Elecciones en Ecuador ASSOCIATED PRESSAP

13 millones de electores. Casi 1.700 observadores electorales, incluyendo un centenar enviado en una Misión de Observación Electoral de la Unión Europea y otros designados por la Organización de Estados Americanos (OEA). Solo dos candidatos.

La segunda vuelta de las elecciones presidenciales en Ecuador de este domingo comenzó con normalidad en las calles, apertura de centros a las 7 de la mañana, hora local, y madrugonazos en algunos sectores del país de personas renovando su cédula de identidad para poder sufragar, en un país donde el voto es obligatorio.

Pero también con las preocupaciones derivadas del decreto de un nuevo estado de excepción la tarde del sábado, horas antes de que comenzara el balotaje entre el presidente Daniel Noboa, que busca su reelección, y la candidata izquierdista Luisa González. El mandatario emitió el estado de excepción que abarca a 22 ciudades en siete provincias y sus respectivas cárceles, a partir de hechos violentos suscitados en distintas partes del país las últimas semanas, así como la acusación formal en Estados Unidos a cabecilla de la banda Los Choneros, alias Fito, y el peligro de una reacción dentro del país.

El Ejecutivo además menciona entre las razones más de 600 noticias de varios medios de comunicación acerca de ataques armados, asesinatos, la suspensión de la jornada electoral en la cárcel de El Rodeo, un informe de inteligencia sobre la evolución e injerencia geográfica de las pandillas y otros operativos donde se ha encontrado armas y municiones

El parlamento ecuatoriano emitió un comunicado expresando su preocupación por el decreto, temiendo los efectos saque pueda tener en la movilización electoral. Es un factor clave para esta segunda vuelta, donde los candidatos que se disputan la primera magistratura llegaron habiendo quedado en la primera con una diferencia de apenas 0,14%, con Noboa a la cabeza.

El representante de la misión de observación electoral de la Organización de Estados Americanos, Heraldo Muñoz, también cuestionó el estado de excepción decretado por el presidente de Ecuador, Daniel Noboa, en siete regiones del país y pidió garantías para que el desarrollo de la jornada electoral.

“Hemos enviado una comunicación escrita, anoche, a la presidenta del Consejo Nacional Electoral (Diana Atamaint) y a los distintos ministerios competentes pidiéndoles garantías para que se puedan ejercer los derechos que tienen que ver con el control electoral en los lugares donde hay estado de excepción”, explicó Muñoz ante la prensa local. Destacó, además, que la votación “es un momento muy importante”, por lo que “esa labor de control electoral tiene que ser ejercida sin limitaciones”.

Ni usar el teléfono, ni fotografiar el voto

Para el balotaje los candidatos se esfuerzan en la organización de sus respectivos partidos y movimientos, el logro de alianzas con otros sectores y grupos que puedan aumentar su caudal de votos y la movilización de electores a los centros de votación para que marquen su opción. La única restricción al momento de votar la impuso el Consejo Nacional Electoral: no utilizar teléfono celular ni fotografiar el voto. Hasta el mediodía del domingo, tan solo un caso así había ocurrido.

El presidente de hecho votó bajo un fuerte operativo de seguridad, acompañado de su familia. No declaró a la prensa. Su competidora Luisa González sí lo hizo para pedir a la policía y las fuerzas militares no intervenir “a favor o en contra” en las urnas y que “se garantice la democracia correctamente”.

Ambos sufragaron mucho antes del mediodía, aunque las mesas estarían abiertas hasta las 5 de la tarde, cuando cerrarían para dar inicio al proceso de escrutinio una hora más tarde.

Para estas elecciones, dos de las cuatro empresas autorizadas por el CNE para hacer exit polls estarían trabajando, pero el propio Consejo Nacional Electoral advertía desde primera hora que los números que arrojaran “no constituyen resultados oficiales y, por tanto, no deben ser tomadas como una fuente definitiva de información, pues no reflejan el resultado real de un proceso electoral”.

Lo dijo su presidenta Diana Atamaint al inaugurar la jornada y al llamar a “votar con esperanza” y luego esperar con “calma y serenidad” los cómputos. “Entendemos la expectativa que genera una jornada como la que vivimos, pero es fundamental recordar que el escrutinio requiere rigor, transparencia y el respeto de los tiempos legales establecidos”, dijo la presidenta del CNE.

Además, pidió rechazar la narrativa de fraude. “Las acusaciones sin prueba no solo dañan a esta institución, sino que minan la confianza en la democracia misma. El fraude no tiene cabida en un sistema que se construye sobre la base de la legalidad”, expuso.

Desde el correísmo que encabeza Luisa González ha habido críticas al manejo institucional del proceso electoral, con la propia abanderada acusando a Atamaint de ser “la mejor jefa de campaña de Noboa”. Este domingo Atamaint afirmó que “la autoridad electoral proclamará los resultados definitivos hasta que el último voto sea contado”.