Bruselas

Gibraltar ignora a Cameron y abre su paraíso fiscal a los fondos opacos

Colas de coches saliendo del Peñón de Gibraltar
Colas de coches saliendo del Peñón de Gibraltarlarazon

Las acusaciones a Gibraltar de ser de un paraíso fiscal no son nuevas. David Cameron está al corriente y en alguna ocasión desde Bruselas se le ha dado un toque de atención. Pero con lo que no contaba el «premier» es con ver a Fabian Picardo por las calles de Londres gritando a los cuatro vientos los impuestos tan beneficiosos del Peñón para convencer a los fondos de alto riesgo británicos a que trasladen sus oficinas del lujoso barrio de Mayfair a la Roca. Habría merecido ver la cara que se le debió quedar al «tory». Ya no sólo por el «robo» de clientela, sino porque además el primer ministro escribió hace tan sólo unos días de su puño y letra una carta a los territorios de ultramar para que pusieran la «casa en orden» y evitaran las prácticas de evasión fiscal. La misiva fue enviada a poco menos de un mes de la reunión del G-8, en la que Cameron será el anfitrión. De momento, Picardo parece que ha hecho oídos sordos. El ministro principal de Gibraltar presentó la semana pasada una campaña en la City defendiendo que operar desde la Roca es «mucho más barato». Es más, en los anuncios de su programa se asegura que para estas empresas es «poco probable que paguen impuesto de sociedades». Picardo, que ha hecho de la captación de «hedge funds» (fondos de alto riesgo) uno de los principales objetivos de su Administración, invitó a varios gestores a Gibraltar, donde les aseguró que el impuesto sobre la renta se limitaría a 30.000 libras esterlinas (35.100 euros) al año, independientemente de los millones que ganen. El Peñón tampoco aplica IVA y las cotizaciones a la Seguridad Social son de tan sólo 120 libras (algo más de 140 euros) por familia al mes. En Reino Unido, el tipo máximo del impuesto sobre la renta es del 45%, el IVA es del 20% y los trabajadores pagan un mínimo del 14% de sus ganancias semanales si su sueldo supera las 797 libras (930 euros). El folleto de promoción dado a los gestores de fondos explica que «las leyes fiscales de Gibraltar son fundamentales para ser elegida como una próspera sede para los fondos». «Los beneficios de cualquier sucursal o establecimiento permanente de una gestora de inversiones no están sujetos a impuestos en Gibraltar cuando sus actividades se lleven a cabo fuera», añade. El impuesto de sociedades sobre las actividades realizadas en La Roca es del 10%, frente al 24% en Reino Unido.

Con todo, Picardo aseguró que el territorio cumple con todas las normas de la UE y defendió que la Roca «no quiere ser asociada con el dinero que proviene de la evasión fiscal, el fraude, el blanqueo de dinero o de cualquier otra fuente que no sea absolutamente aceptable». Tal y como explica «The Guardian», el político también recalcó que España «necesita esforzarse más para demostrar las acusaciones» que hace sobre las autoridades del Peñón. «La reputación de que Gibraltar es un paraíso fiscal nos fue atribuida por personas que nos quieren desestabilizar políticamente», añadió. El número de fondos que operan en esta península de 6 kilómetros cuadrados ha pasado de 20 en 2006 a 150 hoy que gestionan 3.000 millones de libras en activos. El último presupuesto disponible de Gibraltar muestra que los servicios financieros son, junto con el turismo, la mayor fuente de ingresos del territorio, ya que aportan el 33% del PIB.