
Reacciones
La huella del Papa Francisco en la lucha por la justicia en Asia
Los mandatarios de la región destacan la lucha del Pontífice contra las desigualdades o su labor para acercar a los distintos credos

Ningún Papa ha pisado nunca China, pero hace una década, Francisco estuvo más cerca que nunca al convertirse en el primer Vicario de Cristo en entrar en espacio aéreo chino durante su vuelo a Corea del Sur, en agosto de 2014. "¿Quiero ir a China? Por supuesto: ¡Mañana!", musitó a los periodistas en su regreso a Roma.
Este enfoque conciliador, a diferencia de sus predecesores, buscó estabilizar la presencia de la Iglesia en el gigante asiático, aunque a costa de aceptar restricciones a la libertad religiosa. Para sus críticos, esto ha socavado la credibilidad del Vaticano como defensor de los oprimidos. Con todo, tras un notable silencio, el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores chino, Guo Jiakun, finalmente expresó este martes sus condolencias por el fallecimiento del pontífice y destacó recientes intercambios amistosos. "China está dispuesta a trabajar con el Vaticano para mejorar nuestras relaciones", afirmó, abriendo la puerta a un acercamiento que podría tener profundas implicaciones.
La fe en China no es solo una cuestión espiritual; es un asunto altamente político y conflictivo. En este contexto, el Partido Comunista se erige como un gigante ateo que prohíbe a sus 100 millones de miembros abrazar cualquier creencia religiosa. Este dogma se enfrenta a un Estado que, aunque reconoce oficialmente cinco religiones —Catolicismo, Protestantismo, Daoísmo, Islam y Budismo—, lo hace bajo un estricto control.
En lo que respecta al catolicismo, la condición del Papa como autoridad moral suprema para los aproximadamente 10 millones de fieles chinos representa un desafío particular para el presidente Xi Jinping, que ha afirmado la supremacía del partido sobre todos los sectores de la sociedad. La comunidad se encuentra fragmentada entre la Iglesia patriótica estatal y la clandestina, leal al Vaticano.
Desde el inicio de su papado, Francisco se comprometió a cerrar la brecha entre estas congregaciones enfrentadas, que operan en un entorno complicado, bajo diócesis tanto reconocidas como no por la Santa Sede. Los obispos de estas comunidades han sido ordenados con y sin la aprobación papal, lo que complica este panorama. Sin una relación diplomática formal entre Pekín y Roma, Bergoglio se encontró ante importantes controversias. Este complejo entramado complicó sus esfuerzos por establecer un diálogo constructivo y avanzar hacia una mayor cohesión.
Desafíos diplomáticos ante el PCCh
El pasado 22 de octubre, el Vaticano anunció la renovación del Acuerdo con China, firmado en 2018, por tercera vez, extendiendo su vigencia a cuatro años en lugar de los dos previamente estipulados. La decisión generó reacciones contradictorias. Por un lado, críticos de diferentes orígenes, incluido el círculo del cardenal Joseph Zen, obispo jubilado de Hong Kong, denunciaron la renovación como una "traición" hacia los principios de la Iglesia, acusando a la Santa Sede de ceder ante el régimen de Xi. En contraposición, sus defensores celebraron la extensión como un logro significativo. Agostino Giovagnoli, destacado miembro de la Comunidad de Sant'Egidio y clave en las negociaciones enfatizó que esta prórroga representa un paso positivo en las relaciones bilaterales.
Este acuerdo definió la política del Papa Francisco hacia el país asiático, que difiere de la de sus predecesores Juan Pablo II y Benedicto XVI, mucho menos dispuestos a ceder a las exigencias del poder chino, aunque no se cerraron a la posibilidad del diálogo. No obstante, los críticos del Sumo Pontífice han apuntado a “sus mínimas y casi imperceptibles referencias al genocidio de Xinjiang, la destrucción de la cultura tibetana, la desaparición de la democracia en Hong Kong y la persecución de todas las religiones no autorizadas en China”.
Durante su vuelo de regreso al Vaticano tras una gira por Asia en septiembre, el Santo Padre describió a China como "una promesa y una esperanza" para su institucion. Destacó su admiración y respeto, señalando que su rica cultura milenaria y su capacidad para el diálogo “superan a muchos sistemas democráticos”.
Este enfoque hacia el continente asiatico se reflejó en su elección en 2024 de cardenales como Tarcisius Isao Kikuchi de Tokio, Pablo Virgilio David de Filipinas, Paskalis Bruno Syukur de Indonesia, Dominique Joseph Mathieu de Teherán y George Jacob Koovakad de India. Ya en 2015 sorprendió al designar otros prelados de regiones con escasa representación, como Myanmar, Bangladesh, Brunéi, Malasia y Singapur.
Asia-Pacífico homenajea su legado de compasión y compromiso
Los líderes asiáticos han destacado la contundente postura del Papa en su denuncia de la desigualdad económica, reconociendo su valentía al confrontar las injusticias que perpetúan la pobreza en la región. Su profunda empatía hacia migrantes, pobres y marginados lo consolidó como una voz influyente para aquellos que a menudo son ignorados.
El presidente filipino Ferdinand Marcos Jr. subrayó la importancia de su llamado a "conectar con los desfavorecidos", un mensaje que resuena profundamente en un país donde más del 80% de la población se identifica como católica. Entre los principales candidatos al papado se encuentra el cardenal Luis Antonio Tagle, arzobispo metropolitano emérito de Manila, a quien se le conoce como el "Francisco asiático" por su firme compromiso con los principios de equidad y compasión. Tagle, quien ya fue considerado durante el cónclave de 2013, se presenta nuevamente como un aspirante fuerte y humilde, listo para continuar el legado de su predecesor.
Por su parte, el presidente de Taiwán, William Lai, expresó en redes sociales su compromiso de continuar inspirado por Su Santidad, resaltando su dedicación a la paz y la solidaridad mundial. Cabe destacar que el Vaticano es el único Estado europeo que mantiene relaciones diplomáticas con Taiwán, lo que acentúa la importancia de esta conexión.
El primer ministro malasio, Anwar Ibrahim, lo elogió por su extraordinaria capacidad para construir puentes entre diferentes credos, ganándose el respeto incluso en el mundo musulmán. Destacó que "habló con claridad moral sobre el inmenso sufrimiento en Gaza", instando al mundo a recordar que la compasión debe extenderse a todas las víctimas de la violencia, sin importar su ubicación. Su legado, según Ibrahim, es un llamado urgente a la unidad y la empatía en tiempos de crisis.
El obispo Yong-hoon Lee, presidente de la Conferencia Episcopal Católica de Corea, encendió una corona de incienso en una emotiva ceremonia en la catedral de Myeongdong, rindiendo tributo a a quien describió como "un padre muy misericordioso". Durante su intervención, Lee subrayó la conexión profunda del Pontífice con el sufrimiento del pueblo coreano y su dedicación incansable a la paz mundial.
El obispo destacó la profunda tristeza del difunto por la división de la península coreana, revelando su ferviente deseo de visitar Corea del Norte. "Siempre que se producía una catástrofe, ya fuera el ferry Sewol, la tragedia de Itaewon o el accidente del aeródromo de Muan, el Papa rezaba profundamente", afirmó Lee, recordando su empatía ante las adversidades.
Japón: llamado urgente a la paz nuclear
En un momento de gran tensión internacional, Japón reafirmó su compromiso por la paz y la abolición de las armas nucleares. El país del sol naciente, hogar de aproximadamente 440.000 católicos, está sumido en el duelo. Han sido muchos los que han acudido a la catedral de Santa María en Tokio, para rezar en silencio. Los supervivientes de los bombardeos atómicos, aún marcados por el trauma, son algunos de los más afectados.
El jesuita argentino, en su histórica visita a Hiroshima y Nagasaki en 2019, clamó por la abolición de las armas nucleares, un mensaje que hoy cobra más relevancia que nunca. El gobernador de Hiroshima, Yuzaki Hidehiko, advirtió sobre el creciente ambiente de inseguridad global y recordó sus palabras : "¿Cómo podemos proponer la paz si invocamos continuamente la amenaza de una guerra nuclear?".
✕
Accede a tu cuenta para comentar