Lombardía y Véneto abren la vía para negociar más poderes

Triunfo del «sí» en el referéndum consultivo organizado por la Liga Norte.

Dos de las regiones más importantes de Italia, Lombardía y Véneto, confirmaron el domingo en un referéndum no vinculante su deseo de mayor autonomía, y se preparan ya para negociar con el Gobierno central. Los movimientos se desmarcan de la independencia (en un claro distanciamiento de Cataluña), y reclaman un mayor control en algunas competencias, sobre todo en el campo económico. La consulta, convocada por la gobernante Liga Norte y apoyada por la mayoría de fuerzas regionales, arrojó un resultado en Véneto del 98,1% a favor de más autogobierno y un 1,9% en contra, con una afluencia del 57,2%. En el caso de Lombardía, el 95,29% votó a favor y el 3,61% en contra. La participación fue menor, alrededor del 40%.

Unos doce millones de italianos fueron llamados a votar y, aunque sólo lo hicieron poco más de cinco millones, los líderes de ambas administraciones mostraron su satisfacción, e incluso llegaron a afirmar que han superado las expectativas. El presidente de Lombardía, Roberto Maroni, manifestó su alegría: «Ahora iremos a Roma para obtener, en el marco de la unidad nacional, más competencias y más autonomía». Añadió que ahora «podemos escribir una nueva página», puesto que «las regiones que piden más competencias, las tendrán». Similar fue la reacción del presidente de Véneto, Luca Zaia, quién destacó que se trata de un «resultado histórico» y ayer mismo convocó a su ejecutiva para preparar la negociación. En una rueda de prensa para comentar los resultados, manifestó que «éste es el big bang de las reformas institucionales». Entre las peticiones al Gobierno central, se encuentra la de un modelo federalista para Italia, así como una veintena de competencias y que la región retenga el 90% de los impuestos.

Por parte del Gobierno no habrá problema en sentarse a hablar, ya que no hay que olvidar que la Constitución italiana no contempla la autonomía fiscal de las regiones, pero sí prevé que las regiones negocien con Roma en cualquier momento la descentralización de competencias.

En el nuevo escenario, sin olvidar las elecciones de febrero, Lombardía y el Véneto intentarán ganar competencias en materia educativa, medioambiental, de seguridad y fiscal. El mayor problema con el que se podrían encontrar ahora es que las negociaciones marchen despacio y queden en punto muerto durante la campaña. El factor económico es fundamental, puesto que las dos regiones suman el 34% del PIB del país, quieren reducir su déficit fiscal. El líder de la Liga Norte, Matteo Salvini, afirmó que las dos regiones «han votado por el cambio», y añadió que trabajará para que este tipo de consultas se realice en otras partes del país. Algunos han querido comparar el referéndum con el desafío independentista de Cataluña. Sin embargo, los organizadores han insistido en que no tiene nada que ver.