Lord Sewel: críticas al más alto nivel en sujetador

Las fotografías esnifando coca con prostitutas hunden la carrera del hasta ayer vicepresidente de la Cámara de los Lores.

Los escándalos sexuales de Westminster siempre han hecho las delicias de los tabloides británicos. Pero en esta ocasión, el episodio viene más edulcorado que nunca. Lord John Sewel, de 69 años, dimitió ayer como vicepresidente de la Cámara de los Lores después de que «The Sun» publicara unas imágenes en las que aparece esnifando supuestamente cocaína del pecho de una prostituta. En efecto, las instantáneas no son las más adecuadas para la persona que, hasta ayer, presidía precisamente la comisión parlamentaria sobre privilegios y conducta de sus señorías.

El tabloide de Rupert Murdoch atestó la primera cornada al político, casado y padre de cuatro hijos, el domingo. Pero ayer se recreó aún más en la jugada sacando a la luz otras imágenes de Sewel fumando con sujetador naranja y chaqueta de cuero negra y un vídeo en el que despotricaba contra varios políticos. Al «premier» David Cameron le tilda de «superficial» y al alcalde de Londres, Boris Johnson, de «imbécil de clase alta». También tiene palabras para Tony Blair, con el que trabajó estrechamente durante su Gobierno redactando el proyecto de ley de Escocia de 1998, que allanó el camino para la primera devolución de poderes a Edimburgo. Al que fuera su jefe le acusa de haberse «cargado el apoyo laborista» con la guerra de Irak. En la grabación difundida ayer, el escocés dice a las prostitutas que quiere que le lleven «por el mal camino» y reconoce que le hubiera gustado que trajeran «a una joven asiática». Las mujeres cobraron 200 libras (282 euros), según un cheque también publicado. El tabloide asegura que la orgía se celebró en el apartamento que Sewel tiene a su disposición en Dolphin Square, en el barrio de Westminster, como todo los parlamentarios cuya residencia no es Londres.

Tras el impactante reportaje –que reabre el debate sobre la libertad de expresión y la privacidad de una persona pública– se puede decir que la carrera política de Sewel está prácticamente acabada. El Partido Laborista le expulsó ayer de sus filas. La presidenta de la Cámara de los Lores, la baronesa Frances D’Souza, pidió la intervención policial, tras calificar de «escandaloso e inaceptable» el comportamiento de su colega. Scotland Yard realizará una investigación. Y el comisionado encargado de que se mantengan los niveles de comportamiento entre los lores, Paul Kernaghan, realizará otra pesquisa para saber si los actos infringen el reglamento parlamentario. Pero el caso es complejo porque, por primera vez, se plantea si el título de lord –que siempre había sido vitalicio para los miembros de la Cámara Alta– debería también retirársele. El afectado explicó ayer que se iba «temporalmente» hasta que finalicen las investigaciones, tras lo cual «revisaría su posición a largo plazo».

Bajo el reglamento actual, Sewel no podrá volver al Parlamento en tres meses. El periodo se empezará a contar a partir del 7 de septiembre –Westminster está ahora en receso estival– y durante este tiempo no podrá reclamar gastos ni subsidios. En caso de que finalmente no renuncie al título, el político deberá comparecer ante la comisión que hasta ahora presidía, la cual decidirá el castigo, que podría ser el veto de por vida. En virtud de una nueva legislación aprobada en marzo y que el mismo Sewel impulsó, se puede expulsar del Parlamento por mala conducta a los lores, un cargo que es designado o heredado –no elegido–. Cameron, de viaje oficial a Indonesia, señaló que las acusaciones son «muy graves» como para que Sewel pudiera volver a la política en un futuro.